Risto Mejide tiene un nuevo "amigo". El productor, presentador y ventrílocuo José Luis Moreno, uno de los personajes más poderosos y hasta hace poco tiempo innombrables del panorama audiovisual español. El nombre de Moreno ha vuelto a saltar a las primeras páginas de los medios de comunicación después de que ElDiario.es haya publicado que le están investigando por un supuesto caso de fraude en Canal Nou, que los peritos han valorado en 1'9 millones de euros. Concretamente, las indagaciones se han centrado en dos programas de su productora, Alba Adriática: la serie Planta 25 y el espacio De un tiempo a esta parte, que costaron 4 millones cuando la valoración técnica judicial no llega a los 2 millones de euros. Con todo, una oportunidad única para Risto y la productora La Fábrica de la Tele para ajustar cuentas con Moreno, ya que nunca han conseguido que aceptara ninguna invitación después de lo que pasó en 2014 en Hable con ellas

Jose Luis Moreno 3 Cuatro

Cuatro

Programas que pasaron de costar 35.000 a 126.018 euros por capítulo, gastos imposibles de justificar, críticas feroces a la calidad del producto final y a los métodos utilizados por la productora... El listado de agravios que apunta el diario es notable. Y el Todo es mentira se ha apuntado a la caza, calificando a Moreno como un coleccionista de "marionetas y pufos". El madrileño era uno de los protegidos del chiringuito de la televisión pública valenciana en la época de los Zaplana, Camps y Barberá, llevándose más de 20 millones de las esquilmadas arcas de Canal Nou (que recordarán, tuvo que cerrar para refundarse en À Punt). El programa no ha conseguido hablar con Moreno, pero sí con una misteriosa abogada, que asegura representarle pero que no ha querido que su nombre saliera en el espacio de Mejide. ¿Por qué será?

La abogada, una especie de "contestador autómatico" según los colaboradores del publicista, ha rechazado las acusaciones, rehusando que su cliente esté imputado y anunciando que demandarán ElDiario.es. También ha descargado la responsabilidad de las cantidades percibidas por la productora de Moreno, ya que "la Generalitat valenciana estaba de acuerdo". Hombre, no es de extrañar, viendo las dimensiones de la corrupción en el País Valencià. Así entendemos mucho mejor lo que ha dicho la abogada, que "mí cliente está muy tranquilo", y que si no coge el teléfono a Risto y compañía es "porque está en Londres". Ni que Londres fuera Turkmenistán. En todo caso, se ha comprometido a que cuando Moreno vuelva de la diáspora británica contestará amablemente todas las cuestiones necesarias para defender su honorabilidad.

Si el productor se defiende en lo económico igual que gestiona sus relaciones personales y profesionales, se antoja una tarea complicada. Al menos si tomamos como referencia la enorme cantidad de víctimas que ha dejado el productor durante su carrera: Fernando Tejero, Loles León, Yolanda Ramos, Sandra Barneda, etc. Veremos si se produce este encuentro, si consiguen hacerse amigos para siempre... o si Moreno acaba convirtiéndose en el Eduardo Inda del show bussines en Todo se mintiera.