Masterchef continúa con paso firme su nueva temporada en esta nueva edición protagonizada por celebrities. Los Jesulín de Ubrique, Jorge Sanz, Jorge Cadaval, Blanca Romero, Toñi Moreno, Álvaro Muñoz-Escassi y compañía continúan entre fogones con un público fiel cada jueves. Evidentemente, de VIPS susceptibles de ir al programa todavía quedan muchos. Igual que de chefs, restauradores y cocineros del país que todavía no han ido al programa a ofrecer sus consejos, sus platos o sus establecimientos. Mientras hay algunos que han ido un montón a veces, muchos de ellos, más de diez, recibiendo a cambio un cucharón dorado como homenaje y agradecimiento (Jesús Sánchez, Dani García, Martín Berasategui, los hermanos Roca y tantos y tantos otros), muchos otros no han ido nunca... Y por lo visto, seguirán sin hacerlo.
No se entiende que según qué chefs, que además, tienen experiencia para dar y tomar en la televisión, que no les dan miedo las cámaras y que alborotan al personal, que darían juego, vaya, no hayan estado nunca en Masterchef, no como concursantes del Celebrity sino como expertos. Y aquí nos encontramos al chef David de Jorge, más conocido en el mundo televisivo como Robin Food. Después de trabajar codo con codo con Martín "Garrote" Berasategui, fue a parar a la televisión, un medio que lo enamoró y donde ha regalado muchos momentos impagables con su personalísimo estilo de explicar los diferentes platos que cocina y los extravagantes nombres como los bautiza, como este "muslamen de pollo putero":
El cocinero vasco ha concedido una entrevista para la revista Men's health donde recuerda lo bien que se lo ha pasado él en la televisión: “En la tele me lo pasé muy bien y grabamos casi 1.500 programas de cocina. Hicimos cosas increíbles que no volverán a repetirse jamás porque ‘Robin Food’ era un programa fresco, divertido e irreverente a tope. Para chulo mi pirulo. Que venga alguien y lo iguale, si tiene huevos”. Chim pum. Ahora tiene alguna cana más que cuando enamoró a la audiencia con su simpatía y buen humor, pero sigue teniendo aquella socarronería característica y aquel estilo personalísimo para comunicar y dirigirse a sus seguidores.
Su mentor, como decíamos, Berasategui, ha ido infinidad de veces a Masterchef. ¿Por qué él no? La respuesta es sencilla: "porque nunca me han invitado". Haría falta preguntarse por qué. ¿No lo ven un cocinero con un talento y una personalidad que se adaptaran al talent culinario de TVE? Según el mismo De Jorge, su manera de ser no acabaría de encajar en un producto como este: “Son unos lilas. Allí van los cocineros estrellados con su sifón debajo del brazo y yo soy cocinero de delantal, sartén y cabeza de ajos, un poco como ese jabalí que se mete en la ciudad y hociquea en los contenedores de basura dejando todo hecho un cristo. No soy nada cuqui, así que hacen bien en no llamarme”. Y por si no fuera suficiente, también ha hecho un análisis de los tres miembros del jurado, de los cuales ha hablado con unos términos, cuando menos, peculiares: “Qué maja es Samantha, qué perro es Pepe y qué planta tiene Jordi... qué pelazo, qué tipazo y qué culo, madre mía si yo tuviera eso estaría rodando en Bollywood”.
Pedimos que algún día se lo repiensen y en Masterchef inviten a Robin Food, que las deja ir más rápido que el famoso arquero de Nottingham.