Los nuevos episodios del documental sobre Rocío Carrasco siguen desmenuzando la imagen pública de Antonio David Flores, si es que quedaba algún fragmento intacto. La hija de la Jurado relató cómo vivió los embarazos de sus dos hijos, Rocío y David, así como la ruptura con el exguardia civil malagueño. El motivo, una infidelidad delante de sus ojos en una discoteca de Chipiona, en Cádiz, mientras se encontraba en el tercer mes de gestación de su segundo hijo. La versión de la protagonista es cruda y despiadada, una vez más. Ahora bien, la sorpresa ha llegado al ampliar el objetivo de sus ataques a otros miembros del clan familiar, como la prima Chayo Mohedano (hija de Amador, que sale también escaldado), o una periodista y presentadora de televisión como María Patiño. Si durante la última semana la de Telecinco había enviado mensajes muy contundentes contra Fidel Albiac, pareja de Rocío, ahora ya se puede hablar abiertamente de guerra. Según Rociíto, la de 'Socialité' fue cómplice de su exmarido: estaba al corriente de que le estaba poniendo los cuernos, ya que seguía cada paso de la pareja durante aquel verano en la localidad andaluza. Lo sabía. Y lo tapó.
Rocío Carrasco: "María Patiño sabía perfectamente lo que estaba pasando"#RocioVerdad2 pic.twitter.com/DhcTQ90kbn
— Telemagazine (@telemgzn) March 28, 2021
En el otro lado del televisor, Patiño fumaba en pipa. Y no se quedo callada. Las redes sociales fueron el escenario de las réplicas de la presentadora, tan tajante como la propia acusación: Carrasco miente. Y si no miente, no recuerda con exactitud lo que pasó, y qué papel jugó la reportera. "Rocío vive y recrea una verdad pero no cómo fue", escribía en un principio, mientras las redes reventaban contra ella. Precisamente por eso se extendió un poco más durante la emisión del mencionado episodio: "lo viví pero no fue así. No le quiero quitar dolor, pero Rocío no recuerda como ocurrió todo". La cosa se complica: admite conocer los hechos, pero contraataca con una de las corrientes de opinión más extendidas desde que empezó este fenómeno: la versión de Rociíto no coincide con la del resto del mundo. Sea como fuere, recibió palos en forma de miles de tuits, y Patiño no podía dejar de defenderse con dos ideas: "falso" y "mi verdad real, no coincide con su vivencia". En todo caso lo que queda claro es que Carrasco la ha marcado a fuego en el bando de los "malos".
La semana será larga para la comunicadora, que tendrá que defenderse en los platós de televisión, donde los enemigos de Carrasco no son bienvenidos. Muy adecuado para la Semana Santa.