Rocío Carrasco, la siempre controvertida hija de Rocío Jurado, vuelve a estar en el ojo del huracán mediático, pero esta vez no por su lucha contra su familia, sino por un escándalo matrimonial que muchos no vieron venir. La tan anunciada boda eclesiástica con Fidel Albiac, que según Carrasco sería “el evento del año” al conmemorar sus 25 años de relación, ha sido abruptamente cancelada.

En abril de 2024, Rocío sorprendió al mundo del corazón al protagonizar la portada de la revista ‘Lecturas’, donde anunció que este año caminaría hacia el altar con Fidel. Sin embargo, a pocas semanas de que termine el año, no solo no hay boda, sino que tampoco hay señales de que la pareja esté planeando nada en el futuro cercano. La inesperada cancelación ha generado una ola de especulaciones, y algunos, como la periodista Maica Vasco en su canal de YouTube, incluso aseguran que todo fue un montaje para vender exclusivas.

¿Intereses económicos en juego? La verdadera razón detrás del enlace fallido

Las teorías no se han hecho esperar. Algunos apuntan a una posible crisis matrimonial entre Rocío y Fidel, pareja que siempre ha presumido de ser indestructible frente a los escándalos familiares. Según Maica, Fidel podría haber puesto como condición un jugoso contrato de exclusiva para formalizar la boda. Pero, al no conseguirse la oferta millonaria que esperaban, el enlace habría sido descartado.

“Si no es por dinero, si no le pagan bien la exclusiva con Rocío, el tío no se casa”, comenta Vasco en un tono contundente, sugiriendo que la relación podría estar atravesando un momento delicado. Mientras tanto, otros aseguran que Fidel simplemente no está interesado en casarse por la iglesia, lo que ha dejado a Rocío en una posición incómoda frente a la prensa y sus seguidores.

¿Exclusiva falsa o estrategia fallida?

Maica Vasco no ha tenido reparos en acusar a Rocío Carrasco de “vender humo” con su boda eclesiástica. Según ella, la hija de Rocío Jurado habría utilizado el anuncio como un truco publicitario para mantenerse relevante y generar ingresos. Pero ahora que la boda no se ha concretado, las críticas no se han hecho esperar. “No solo no hay boda eclesiástica, sino que tampoco hay fecha.

Además, dicen que estas Navidades, si no cenan con Terelu Campos, se pondrán como mucho una película de Netflix”, ironizó Maica en su canal, dejando entrever que la vida de Rocío está lejos de ser el glamour que proyecta en las revistas. Además, los rumores apuntan a que ni siquiera se habría empezado con los trámites necesarios para una ceremonia religiosa, lo que alimenta aún más las dudas sobre la veracidad del anuncio.

Por ahora, solo el tiempo dirá si esta cancelación es un simple traspié en los planes de la pareja o el inicio de una crisis más profunda. Lo único seguro es que Rocío Carrasco vuelve a estar en boca de todos, pero no precisamente por motivos positivos. ¿Será este el fin de la historia de amor con Fidel o un nuevo capítulo de su vida mediática? Solo queda esperar para ver si Rocío sorprende, una vez más, con otro giro inesperado.