El drama familiar de los herederos de Rocío Jurado sigue siendo explotado en Telecinco para recuperar audiencia. Agosto y lo que va de septiembre la cadena está siendo derrotada por antena 3 y tienen el arma definitiva: el estreno de la segunda temporada de Rocío, la serie vendida como un documental para ocultar lo que es: una buena entrevista larga.
La relación de Rocío Carrasco con su exmarido Antonio David Flores que la hizo caer en la depresión y el intento de suicidio, ha quedado clara en 15 capítulos. Queda por explicar por qué la heredera universal en el testamento de la Jurado no se habla con sus hermanos, Gloria Camila y José Fernando, adoptados pero a todos los efectos igual de hijos de la Jurado.
Rocío Carrasco abraza a su hermana Gloria Camila, al lado Fidel Albiac, GTRES
Para empieza a hinchar el globo, Telecinco recurre a su programa de sábados: Viva la vida. Explican que una de las hermanas se está planteando una aproximación: Gloria Camila. Es la pequeña pero la más madura y quiere recuperar el trato con la hermana mayor. Y por eso el programa explica, por primera vez, de quién es la culpa de que las dos hermanas ni se hablen.
Lo explica el miembro del clan a sueldo del programa: la madrastra de Gloria Camila, Ana María Aldón, segunda esposa de José Ortega Cano. El marido de la Jurado adoptó a los niños colombianos con la folclórica y su actual mujer explica que Gloria Camila quiere arreglar una pelea que empezó Rocío Carrasco.
Ana María Aldón, Telecinco
Ana María Aldón explica que quien cortó la relación con sus hermanos adoptados fue Rocío Carrasco: "Gloria Camila seguía llamando a su hermana, para preguntar por sus sobrinos, y cada vez Rocío Carrasco le da más largas. Fue Rocío Carrasco quien dejó de tener contacto, posponiendo las cosas, diciendo que mejor hablar otro día, y así...”.
Uno de los momentos más terribles de la docuserie fue cuando Rocío Carrasco acusó a su madre de haberse equivocado casándose con Ortega Cano. La hija enterrando la memoria de la madre y destrozando a su padrastro. La hija de Ortega Cano, Gloria Camila, quiere pasar sobre este dardo de mala leche contra el torero y reconciliarse con Rociíto.
Ortega Cano y Gloria Camila, padre e hija, GTRES
Los rumores sostienen que la docuserie ha hecho dudar a Gloria Camila de la versión familiar que hasta ahora le han explicado del distanciamiento de Rocío Carrasco y empatizaría con el sufrimiento de su hermana por un matrimonio tóxico con Antonio David que ha destruido a una familia.
Lo que nadie explica es el otro motivo del destrozo familiar: el dinero. Muerta la Jurado, repartió de manera desigual su inmensa fortuna y en lugar de hacer que los tres hijos fueran iguales ante la ley privilegió a una: la hija biológica. Muy feo.
El misterio que Telecinco difícilmente resolverá en la 2.ª temporada de la docuserie es quién convenció a la Jurado de que no dejara nada, excepto la legítima que obliga la ley, a sus dos hijos pequeños, adoptados y discriminados.
Si toda la familia Jurado Mohedano detesta a Rociíto es porque como heredera universal en el testamento se lo quedó casi todo. Siempre es el dinero.