Rosa Díez: ¿política o humorista? Esta duda circula desde hace muchos, muchos años. Cada vez que abre la boca despierta carcajadas incontrolables. Ya lo hacía cuando era militante del PSOE. Repitió cuándo abandonó el partido en el 2007. Todavía más memorable fue cuando fundó UPyD, el (peligroso) espejo en lo que se refleja estos días Cs. Por no hablar de cuando los naranjas se zamparon a su formación, dejándola más sola que la una. Aquello fue un gran punto de inflexión, transformando su enfado y pensamiento ultraunionista en una creciente "gastroenteritis" tuitera. No hay día que un tuit de la "vasca" no provoque un disturbio en la red. Un disturbio cómico, claro está. Bien, pues vuelve al ataque. Díez ha vomitado su catalanofobia contra Miquel Iceta, al que acusa de "defender" a un preso político. ¿A quién? A Jordi Cuixart. Perdón, queríamos decir "Cruixart".
J. Cruixart, juzgado por graves delitos contra la democracia, proclama en el Supremo "lo volveremos a hacer". Iceta les dice que lo hagan "dentro de la ley". A ver,Iceta,q para hacerlo dentro de la ley tenía q haber dicho "no lo volveremos a hacer".De nada.https://t.co/pBLvztACnB
— Rosa Díez (@rosadiezglez) 26 de junio de 2019
El odio visceral de Díez contra Catalunya y el independentismo le pasa factura. También ortográfica. Tiene el mismo problema que fiscales, jueces y acusaciones del juicio del 1-O, que no han sido capaces de pronunciar correctamente el apellido del presidente de Òmnium Cultural después de cuatro meses de sesiones. Y Rosa, orgullosa, no quería ser menos. Aunque siempre queda la duda si es un problema de ignorancia o de odio. Lo decimos porque le pasó una cosa parecida al escribir Catalunya. Mejor dicho, al renombrarla: "Caraluña".
El gobierno de Caraluña tiene competencias 'ejecutivas' en política penitenciaria, no competencias 'exclusivas'. No puede inventarse un pseudo tercer o cuarto grado para poner en la calle a quien quiera y cuando quiera; salvo que el Estado mire hacia otro lado y lo permita.
— Rosa Díez (@rosadiezglez) 25 de junio de 2019
Como podéis imaginar, la reinterpretación ortográfica de Díez ha sido un gran pasatiempo en las redes, especialmente activas cuando se trata de la política. Los internautas le tienen gran estima:
¿Cruixart, Cruasán, Crujiar...? Si no sabes ni escribir su nombre. Lávate la boca con lejía, fachorra
— Pepa Sal ����️ (@pepa_sal) 26 de junio de 2019
Cruixart? Almenos aprende a escribir su nombre.
— Pau SAN (@PauAndreu6) 26 de junio de 2019
AYER CATACRUÑA?
— Jonathan dos (@jvlpart2) 26 de junio de 2019
HOY CRUIXART?
A QUE COLEGIO HAS IDO?
NO TE ENSEÑARON A ESCRIBIR?
ES QUE ERES ANALFABETA?
QUÉ ES CRUIXART, UNA MARCA DE GALLETAS?
CROSA DIGLEZ?
A ver si ahora vais a venir tú y tus gatos a decirle a quienes están presos de forma injusta, lo que tienen que decir, Rosa.
— Filosofía Perdida (@FiloPolitics) 26 de junio de 2019
Rosa que es Caraluña...?
— Capitán Collons_988 (@despertaferro33) 25 de junio de 2019
otra vez de garrafón..???
Los Caralanes te odian
— man-el (@valhallaman2) 25 de junio de 2019
No entiendo cómo una ex-mecanógrafa del PSOE puede escribir esos "q". 😂
— - M EN U L E R - (@Zerv4ntes) 26 de junio de 2019
Rosa, solo te faltan los gatos y te dan el papel en Los Simpson👇🏻👇🏻👇🏻 pic.twitter.com/5SZ0DKhn7z
— Sergi Pascual Ferran (@SergiPascualFer) 25 de junio de 2019
El show de Rosa Díez es como Las Vegas: Está abierto las 24 horas, los 365 días del año. Si ella fuera un casino, eso sí, estaría en la ruina: No para de regalar "premios" a sus clientes, que en el 90% son haters. Ahora bien, el público le agradecemos mucho sus esfuerzos por hacernos reír.