Rosalía no esconde su devoción por el flamenco más puro y por eso algunos puristas detestan a la catalana y la acusan de apropiación cultural por no tener "sangre andaluza" y ser "paya". La cultura no es de nadie, ni el flamenco es de gitanos, ni el jazz de negros ni el pop de blancos. Ella ha contestado alguna vez las críticas: "Las barreras musicales, al igual que los géneros, están tan diluidas que realmente no existen". Y en pleno confinamiento se ha hecho un dibujo en la uña de dedoo corazón haciendo una peineta a sus críticos.

Rosalía es lista, no añade ningún mensaje a la foto porque está todo dicho. Cada uno la interpreta como quiere. Los cazadores de tendencias dirán que es moda tatuarse la uña. Otros que hacerse un dibujo de media luna y estrella es un guiño a la bandera de Turquía. Pero sólo los más expertos saben a quién se está refiriendo la de Sant Esteve Sesrovires. Es un homenaje a Camarón de la Isla. El mayor artista flamenco se tatuó en la mano la media luna (árabe) y la estrella de David (judía):

EP

Es este el sentido del mensaje: Rosalía hace una peineta, una corte de mangas a todos los que se han cansado de decir que no es gitana y no puede hacer flamenco. Como cuando cantó un tema de Los Chunguitos a los Goya, "Me quedo contigo", y la insultaron "Paya catalana antigitana de moda".

EFE

La campaña fue tan repugnante que Rosalía responde haciendo suyo un símbolo de identidad del más grande: Camarón, gitano y flamenco. Tiene un millón de likes en 12 horas. Un millón de bofetadas en la cara de los fóbicos anticatalanes que prohibirían que Rosalía cantara flamenco. Lo que tienen es envidia.