Rosalía es el ejemplo evidente de una máxima entre los artistas: un gran artista nace, no se hace. Y ella ya llevaba la música dentro cuando era una niña. Lo demuestra el vídeo más adorable que la cantante de Sant Esteve Sesrovires ha publicado nunca, imágenes de bien pequeña tocando la guitarra y poniendo caras cuando las que interpretan una canción son otras niñas.
Cada familia disfruta de la Navidad a su manera. Después de comer hay quien se entretiene con juegos de mesa. Pero en casa de Rosalía pasan el rato mirando vídeos familiares, la diva del Baix Llobregat graba la pantalla de la tele y publica sus recuerdos de infancia en Instagram. Primero con una guitarra, que es tan grande como ella, en las manos. Después, haciendo muecas cuándo otra toca la flauta travesera. De fondo, los comentarios emocionados de los que pasan las Fiestas con la cantante: "¡Qué pequeña!", le dicen.
De pequeña, la Rosalía artista ya era grande. Ahora llena estadios y es un fenómeno enorme.