Rosalía brilla sin highlighter, luce la Combi Versace y de todas las otras marcas de alta costura, solo quiere sacar billetes de 100, cerrar el centro comercial y comerse sola un helado. Querría tener un fucking money man, sin embargo, el cierto es que ha nacido para ser milionària. La de Sant Esteve de Sesrovires estaba destinada a volar de su pueblo del Baix Llobregat para convertirse en una estrella mundial, hacer cafés con Kylie Jenner, parar toda la planificación de una boda con Rauw Alejandro, y ser la estrella de la siguiente temporada de Euphoria sin ser actriz. Rosalía Vila Tobella tiene nombre de superestrella, todos lo sabemos. ¿Y cuál es el secreto de su éxito? Por muchos lujos, dinero, y celebridades que babean por ella, la Motomami sigue manteniendo su esencia natural que, a veces, hace que ni ella misma acabe de controlar su vida VIP. Atentos.

Hemos visto a la Motomami catalana estar rodeada de todo tipo de celebridades de Hollywood que lo admiran. Recientemente, aparecía a la fiesta posterior de los Oscars donde acaparaba todas las miradas de la prensa con un increíble vestido blanco con transparencias que dejaba entre ver un corsé increíblemente sexi. Cámaras, lujos, entrevistas, pero el momentazo de Rosalía fue sin duda el menú que se pidió para cenar después del acontecimiento, ni más ni menos que un McDonald's, un pedido de un batido de mango, una McGriddles con huevo bacon y queso y un paquete de mayonesa para acompañar. Lo que decíamos, todo muy sencillo y natural, estaríamos hablando de una elección que podría hacer cualquier otra persona normal. Repetimos, Rosalía está rodeada de lujos y dinero, sin embargo, a veces ni los sabe controlar. Y no lo decimos por como gestiona su cuenta bancaria, nos referimos a su coche delujo con el que se pasea por Los Ángeles, el cual le ha hecho pasar una jugarreta en un día de estudio.

Poca gente tiene ganas de trabajar un día de lluvia y frío, y la misma Rosalía lo confirmaba vía Instagram, publicando un videoselfie donde, en inglés, aseguraba que le daba mucha pereza ir a trabajar y que estaba la mar de bien dentro del coche viendo como caían las gotas de lluvia por la ventana. "No lo sé, pero hoy no quiero ir a trabajar" decía mientras sonreía haciendo burla. Pero la broma de no querer apresurarse para estrenar el disco le ha salido mal, porque poco después publicaba otro vídeo, donde se la notaba completamente desesperada porque estaba sonando una alarma del coche y no sabía como pararla. Ella es una chica que no controla la complejidad de las nuevas tecnologías, y en el vídeo podemos ver cómo lo toca absolutamente todo, excepto el botón que debe tocar para parar la alarma. Suerte que en ese parking,, cerca del estudio donde hace magia, llegó un chico al rescatar que le solucionó la cuestión.

"Gracias a dios que un chico del studio me ha ayudado" escribía en el último storie dedicado a esta anécdota. Resulta, pues, que Rosalía a tocado, sin querer, un botón rojo de sus llaves del coche donde había escrito la palabra Panic, que seguramente se utilice en caso de emergencia. Ella misma lo escribía en el vídeo, en grande y en rojo: PANIC. Una anécdota de una persona que, claramente, no es muy fanática ni está familiarizada con el mundo de los coches, Rosalía es más de motos. Lo que sí que le gusta a la catalana es mostrarse natural, y en este caso, se trataba de una secuencia de vídeos que quería enviar a un compañero de trabajo, que seguramente debió estar esperándola dentro del estudio, pero que, finalmente, ha querido compartir con todos sus seguidores. Después de este divertido momento solo llegamos a una conclusión: tendremos que tomarnos con paciencia el estreno de su nueva era y el nuevo álbum...