El nuevo recuento de muertos por coronavirus de la Generalitat de Catalunya tiene a España desconcertada. No saben exactamente como tomárselo. Moncloa no está de acuerdo con la inclusión de los datos de muertes en las funerarias, pero hay un ser que seguro que da volteretas con la actualización: el infame Eduardo Inda. Ahora bien, al personaje no le han hecho falta las más de 3.000 defunciones para vomitar una nueva excrecencia digna de su bajeza moral, empeñado en escupir contra el enemigo indepe: "La ficticia república catalana sería hoy el país con más muertos de coronavirus por millón de habitantes"
La ficticia 'república catalana' sería hoy el país con más muertos de coronavirus por millón de habitantes https://t.co/cazBK6b13o
— Eduardo Inda (@eduardoinda) 14 de abril de 2020
Inda, nauseabundo por naturaleza y compitiendo cada día en la funesta tragedia del coronavirus, se habrá puesto como unas castañuelas al saber que la cifra real de muertes en Catalunya ha aumentado de forma notable. Pero, afortunadamente, hemos podido encontrar el sopapo sideral que le ha propinado Xavier Sala-i-Martin, y que lo tiene todo: contundencia, rigor y el sarcasmo que merece el director de Ok Diario, maestro de las cloacas informativas y ultra con pedigrí: "No sabemos cuantos muertos habría habido en una Catalunya independiente. Los números que das son los que realmente ha tenido Catalunya formando parte de España. Tus datos demuestran que la Sagrada Unidaz ha sido nefasta para Catalunya. ¡Pero eras tan bobo que no te das ni cuenta!".
NO sabemos cuantos muertos habría habido en una Catalunya independiente. Los números que das son los que realmente ha tenido Catalunya formando parte de España. Tus datos demuestran que la Sagrada Unidaz ha sido nefasta para Catalunya. Pero eres tan bobo que no te das ni cuenta! https://t.co/9nkM2owwkl
— Xavier Sala-i-Martin (@XSalaimartin) 16 de abril de 2020
La mezquindad se combate cada día. Algunos pensarán que ni siquiera se merece el esfuerzo de teclearle el repaso, pero no: nunca nos cansaremos de mandar a hacer puñetas a este indeseable.