Irene Montero y Pablo Iglesias forman una de las parejas amorosas más consolidadas del espectro político español. En el Congreso hay algunas relaciones de hecho y matrimoniales, como la de Iván Espinosa de los Monteros y Rocío Monasterio (VOX), pero la más conocida es la del ex político de Vallecas y la ministra de Igualdad. Se llevan diez años, pero mantienen una relación formidable: próximamente cumplirán 8 años saliendo de novios.
Con tres hijos por el medio, Aitana, Leo y Manuel, Iglesias y Montero viven desde hace año y medio una nueva etapa desde que el fundador de Podemos dejara la política después de la catástrofe de la izquierda en la Comunidad de Madrid, donde Ayuso arrasó. Montero, en cambio, sigue al pie del cañón y siempre rodeada de polémica. Ahora ha dado una entrevista a El Huffington Post, pero ha hablado muy poco de política. Sorprendentemente ha revelado muchos detalles de su vida privada y de cómo lleva la relación con su hombre. Llama mucho la atención. Ojo con los detalles, impactantes...
Iglesias no le caía bien
Montero revela que su relación con Pablo Iglesias no fue precisamente de aquellas a las que llaman "flechazo". Todo lo contrario, de hecho. Pablo e Irene habían coincidido en algunos mitins y actos de la izquierda militante, pero nunca se habían cruzado palabra. Se tenían vistos pero, en principio, no se atraían. "Teníamos amigos en común y lo había conocido alguna vez en un acto de Izquierda Unida o de la Juve, pero nunca habíamos hablado. No me caía especialmente bien... Después lo conozco, ya de tener una cotidianidad, militando en Podemos," confiesa la ministra. Muy fuerte.
Reticente a las redes sociales
La mujer de Pablo Iglesias declara a El Huffington Post que las redes sociales son para ella una herramienta de trabajo, especialmente Twitter. Cierto es, sin embargo, que de vez en cuando, las utiliza para colgar fotografías con sus maravillosos bomboncitos, que tan buenos momentos le dan a diario. Es el caso del pasado día de Reyes, el preferido de los más chiquititos, cuando la de Podemos no se pudo privar de colgar una foto donde salían los hijos -de espaldas- pintando acuarelas. Bonito, bonito, seguro que les encanta el color púrpura, el preferido de su mamá. "Me río muchísimo con ellos, me lo paso muy bien", remata.
Su primer beso y su juventud
Los primeros besos no se olvidan nunca, y Montero tampoco lo hace. Recuerda que fue "al colegio", pero no con Pablo Iglesias, el hombre de su vida. En aquella misma época, la de la juventud en su máxima expresión, la responsable de la cartera de Igualdad también era muy fiestera, aunque no tanto como Íñigo Onieva. "Siempre he sido muy 'doña perfecta' de mis estudios, pero cuando tenía cumplida la responsabilidad, pues a disfrutar", explica, añadiendo que su cantante preferida era Sonia Madoc, del dúo Sonia y Selena. Bárbaro.
