Nueva entrega del excelente L'Eclipsi que conduce Roger Escapa en El Suplement de Catalunya Ràdio y que también se puede ver en 3Cat. Después de oír a Toni Cruanyes abriéndose en canal, ahora le ha tocado el turno a otra comunicadora que lleva mucho tiempo ante cámaras, Samanta Villar. La presentadora nacida en Barcelona y criada en València, buena gente, talentosa y sin pelos en la lengua, cosa que podemos constatar los que hemos tenido la suerte de conocerla de jóvenes, coincidiendo en la facultad, ha hablado sin ambages de aspectos desconocidos de su vida, ha revelado cómo vivió la polémica del libro en que desidealizaba la maternidad, se ha mojado sobre el sensacionalismo y si lo practica, y cómo entiende el amor, la fidelidad y la infidelidad, entre muchas otras cuestiones.
¿Su mejor noche?: "Alguna de las muchas que pasé de Erasmus en Amsterdam, época dorada de mi vida, con 19 añitos. Estaba cada día en casa de alguien o en la habitación de alguien en la residencia de estudiantes. Tenía pareja, pero se quedó aquí. Ya se sabe qué pasa en el Erasmus". Sensacional Escapa cuando, haciendo cachondeo con el programa que presentó mucho tiempo, le deja caer un irónico "¿no hace falta que te pregunte si estuviste '21 días fumando porros', verdad?". "Se consume menos en Amsterdam que en Barcelona". También le suelta si "le llaman 'Orgasmus por alguna cosa', y ella: "No me acuerdo, pero sí sé que me lo pasé muy bien". Momento que el presentador aprovecha para poner encima de la mesa si le han sido infiel a ella alguna vez, y Samanta lo tiene claro: "Sí, y tanto, muchas veces. Creo que no lo he perdonado, que ha sido motivo de ruptura. Recuerdo el daño, las crisis serias, pero como las he superado y me han hecho crecer, mi cerebro olvida".
¿Y ella? ¿Lo ha sido, de infiel?: "Sí. Muchísimo, jajaja. Y estoy contenta de haberlo sido. Antes me arrepentía, y ahora con el tiempo pienso 'suerte que fui infiel cuando podía serlo y cuando tenía sentido la exploración que hice. Me han enganchado mensajes, y yo ya tenía muchas ganas de decir: 'Mira, pues sí. ¿Qué quieres que te diga'?". Con la madurez, sobre el amor, "he aprendido a comprender muchas cosas, antes tenía idea de la infidelidad y un juicio. Y ahora veo las situaciones y entiendo los comportamientos, y veo las personalidades y las probabilidades que eso te pase quieras o no. Y la naturaleza humana, y la construcción social. Hay muchísimas parejas que conozco y que son infieles, el uno y el otro, y a veces se lo dicen y a veces no. A veces son relaciones más o menos abiertas, pero tampoco se habla... y acabo entendiendo todos estos comportamientos".
Después, turno final con preguntas comprometidas jugando a la Jenga, como "¿cómo es el sexo post parto?". Y ella: "no me salté la cuarentena. Ni ganas. Estaba yo pa... Aquí no entra ni Dios". El azar ha hecho que le toquen más preguntas picantes: "¿Cuál es la fantasía sexual que te queda por cumplir?"... "Yo he sido muy normativa, no te pienses. No he hecho nada raro. Tengo fantasías, pero tranquilas. Seguramente, mi fantasía es tener sexo, ya está, jajaja".