Sandra Barneda está viviendo un momento de éxito. En el campo laboral, es una de las principales caras de Telecinco -actualmente presenta Conexión Honduras, el debate de Supervivientes- y dedica el tiempo que le queda a escribir: ya ha publicado cuatro libros.
En el campo personal, es vox pópuli que mantiene una relación con la colaboradora de Telecinco Nagore Robles. Ambas forman una de las parejas más mediáticas de las redes y entre la prensa del corazón.
A pesar de la ola de éxito, Barneda acaba de sacar a la luz su "vocación frustrada". Se trata del interiorismo, que viene poniendo en práctica desde que era una niña.
Según explica en una entrevista a Telecinco, la falta de tiempo por la tele y los libros la ha llevado a reducir el interiorismo a un hobby, cuando realmente "este mundo le apasiona".
"Una de las pasiones de mi madre es la decoración y, de hecho, la casa familiar que tenemos en L'Empordà la diseñaron y la hicieron toda ellos, así que lo he vivido en casa [la pasión por el interiorismo]," ha explicado.
Barneda vive hoy el interiorismo a través de los que más saben: "siempre compro revistas, leo webs, blogs... y en El Rastro [mercado ambulante de Madrid] ya tengo amigos que me conocen como una de las que siempre se pasa", relata.
¿Un futuro sin tele?
La pasión de Barneda por el interiorismo hace que se mire con lupa todos los sitios que pisa, y que habita. De hecho, desde que se instaló en Madrid en 1997, ha vivido ni más ni menos que en 17 casas diferentes. "Soy muy nómada", relata, para añadir que una de las casas que compró en la capital española "la tiré entera y la hice toda yo".
Así, Barneda no se cierra a un futuro sin televisión, para dedicarse al interiorismo. "¿Pues por qué no? Yo sí, yo encantada. Me haría feliz", explica. Eso sí, deja claro que no le gustaría "dejar de escribir".