Santi Millán es maravilloso. Y Marc Giró, también. Así que imaginen qué puede salir de una deliciosa conversación entre los dos. Una charla que tuvo lugar hace unos días en el programa del segundo en TVE, Late Xou con Marc Giró, y que ahora está corriendo como la pólvora por las redes sociales gracias a un vídeo hilarante de Tik Tok.
El imprescindible programa de entrevistas de Giró tuvo la buena pensada de invitar a un actor y presentador catalán que siempre ha dicho y hecho lo que le ha salido del moño, sin temor del qué dirán. Solo hay que ver qué pasó y cómo gestionó todo el tema de su vídeo íntimo con una mujer que no era su pareja Rosa Olucha. Chapeau. Santi desprende una bondad y un optimismo que fue asqueroso como lo señalaron muchos para quererlo hundir. Por eso Santi lleva toda la vida enamorando al público y despertando un buen rollo que desarma cada vez que lo hemos visto encima de los escenarios o en la pequeña pantalla. Haciendo de actor, de colaborador (el mítico Paco de los programas del Buenafuente), o como desde hace ya unos años, de presentador de programas como Got talent.
Pero es que Santi tiene la sana virtud de hacer que no puedas apartar los ojos de la pantalla, tanto cuando interpreta algún papel como cuando habla de él mismo y de todo lo que le ha pasado en la vida. Y experiencias tiene un montón, especialmente, de cuando formaba parte de la maravillosa compañía La Cubana. Le pregunta Marc Giró qué pasaba cuando los miembros del grupo iban a tomar algo, o de fiesta, a la mítica sala gay 'Metro' de Barcelona, "que me parece que ahora ya está cerrada", dice Giró. Y Millán explica qué pasó un día concreto, cuando él estaba jugando en el fondo del local en una máquina que había allí, de aquellas de baloncesto, de lanzar una pelota en una canasta... "que estaba delante del 'cuarto oscuro'". Para los no iniciados, una habitación oscura donde puede pasar de todo, ya se imaginan qué, sin entrar en detalle. O como dice Giró, "allí es ya... sálvese quien pueda. Ojos que no ven... polla que te llevas". Un Giró que estaba con los ojos como platos escuchando qué explicó Santi Millán.
Millán lanza, la pelota rebota en el aro, pasa encima de su cabeza y "botó, volvió a botar, volvió a botar... y se metió, poco a poco, dentro de la oscuridad... ¿Qué hacemos? Qué hacemos?... Tendremos que entrar a buscarla", recuerda el actor y presentador. "Nosotros llevábamos un mechero... e íbamos haciendo como... ¿tenías como flashes, no? Cada flash... la pelota no la vimos, pero madre mía".
Absolutamente sensacional. Ya lo saben, si algún día están en un cuarto oscuro, y oyen unos golpecitos..., probablemente sean de una pelota de baloncesto... y después verán aparecer a Santi Millán con un mechero. Pero ustedes,ntinúen como si nada con lo que estén haciendo, que él no les molestará.