Dicen que las desgracias nunca llegan solas. Y Sara Carbonero está sintiendo en sus carnes el dicho con toda su crueldad. Su vida se ha convertido en un drama permanente: a sus problemas de salud se le ha añadido la separación del marido, Iker Casillas, y las escandalosas noticias en torno al conocido como 'el yerno de España'. Presuntas amantes circulando por los platós de televisión, historias sobre su afición al alcohol, un retrato demoledor que habla de su egoísmo... el exportero del Madrid va coleccionando medallas, para escarnio de la expresentadora de Telecinco. La de Toledo intenta levantar la cabeza y pasar página, como por ejemplo volviendo a hacer radio. La vida, sin embargo, no le da tregua. Cuando no es una cosa, es otra. Algunas graves e irreparables.

Iker Casillas y Sara Carbonero enfadados / Telecinco

Ruth, supuesta amante de Iker Casillas / Telecinco

Sara Carbonero llorando en la radio / Marca

En esta ocasión, el motivo no tiene nada que ver con el batacazo matrimonial: Carbonero se ha despedido en redes sociales de una amiga que acaba de morir. Una mujer que se llama Maribel y a la que dirige un mensaje lleno de emoción: "fuiste la mejor maquinista del tren que pudimos soñar. Te recordaremos siempre con tu sonrisa eterna". Tiernas palabras que remata con dos exclamaciones que últimamente son demasiado habituales en su día a día: "qué día tan triste, qué injusta es la vida a veces", escribe. Un nuevo golpe a su estabilidad cuando parecía encauzar los últimos tropiezos sentimentales, y mientras continúa preocupada por sus temas médicos. En todo caso, intenta mantener la calma y la ilusión de cara al futuro: "me pido la vida" es la rúbrica final de estas palabras de pésame.

Sara Carbonero muerte amiga / Instagram

Sara Carbonero pensativa / @saracarbonero

Afortunadamente, Sara no está sola: tiene a sus hijos, el gran tesoro que le quedará de su época con Casillas, y un círculo de amistades que la protege, la anima y la empuja adelante. Seguramente, la mejor de las noticias ante el negro panorama en el que se ha convertido su existencia. Ánimo.