Sergio Ramos vuelve a ser noticia. Hasta ahora el futbolista acaparaba las portadas por su supuesta crisis con Pilar Rubio. Todo apuntaba que habían pasado la verbena del 24 de diciembre separados y, después de muchos rumores y alguna reacción extraña por parte de los protagonistas, el matrimonio estaba a un paso de la ruptura. Todo dio un giro inesperado cuando los dos perfiles publicaban una fotografía de la familia en el completo, con beso incluido de la pareja. Un post que sin lugar a dudas paraba las predicciones de la prensa rosa. Ahora, el futbolista vuelve a estar entre las portadas, pero no precisamente por su vida sentimental. Sergio Ramos protagonizó una monumental bronca a un aficionado al final del partido contra el Athletic Club. Perdió totalmente los papeles.

 

18 años después, el futbolista volvía a defender el escudo de su ciudad, el Sevilla F.C, el club donde debutó antes su fichaje en el Real Madrid. Así pues, el pasado mes de septiembre anunciaba su vuelta, un fichaje que conmocionaba y alegraba a toda la afición sevillista, pero que no ha acabado de dar sus frutos en conjunto con el equipo. Actualmente, el Sevilla Futbol Club no está pasando por su mejor momento con respecto a la clasificación de la Liga. Tan solo han ganado tres partidos en total, se encuentran a la 16.ª posición y parece que les costará remontarlo. Ayer la jornada los enfrentaba contra el Athlètic Club de Bilbao y el resultado también fue desfavorable. Jugaban en casa y la derrota afectó tanto al orgullo del equipo como al de la afición. La decepción calaba en el ambiente, partido derrotado es igual a orgullo masculino afectado. Durante la entrevista postpartido, la testosterona lo hizo estallar todo.

Sergio Ramos estaba atendiendo a la prensa cuando se fijó en la actitud de un aficionado, y sin pensarlo, le llamó la atención al puro estilo "¿Qué miras bobo"?, de Leo Messi. ""¡Ten un poco de respeto que estamos hablando, ten un poco de respeto a la genta y al escudo, estamos hablando, respeta a la gente y cállate ya!, le decía llamando al aficionado. El futbolista perdió los papeles y el vídeo se ha vuelto viral en la red. De momento, se desconoce exactamente lo que estaba haciendo el aficionado del Sevilla en ese instante, pero Sergio Ramos dijo basta. Más tarde, volvía a dar la cara con la prensa explicando, más calmado, que es lo que había pasado.

Una actitud que no ha gustado nada a muchos seguidores del club. Algunos lo cuestionan y le reprochan el papel que tenía con los aficionados del Real Madrid, otros, en cambio, creen que ha sido una reacción valiente, que ha demostrado firmeza y educación. Aunque nos hubiera gustado ver exactamente qué tontería estaba haciendo el aficionado del Sevilla, creemos que la respuesta del jugador se ponía a la misma altura que el provocador. Una guerra de titanes que, como siempre en el mundo del fútbol, tienen que demostrar quién es más valiente.