Shakira sigue obsesionada con Piqué. Hace meses que no lo ve, que no vive allí, que ni siquiera comparte continente con su ex. Instalada en Miami, sigue haciendo valer su victoria en el acuerdo de separación. Recapitulamos, se ahorra una pensión de separación que le tendría que pagar por ley a Piqué porque ella es inmensamente más rica que el exfutbolista y lo tiene que compensar por la pérdida de estatus. Le quita la custodia de los niños, se los lleva lejos de la familia Piqué a los EE.UU. e impone la cláusula anti-Clara Chía. La estrofa de la canción con Bizarrap que hunde a Chía "Clara-mente no es persona buena" muestra lo obsesionada que está la colombiana con su sustituta veintidós años menor. El abogado de Gerard negó que la cláusula existiera pero es que el acuerdo de confidencialidad le impide revelarla. Lo acaba de hacer Telecinco en El programa de AR.
En la tertulia de corazón de Ana Rosa Quintana se ha vertido la confirmación de una noticia que el abogado de Piqué negaba. Según Telecinco"Los hijos de Shakira no podrán ir mañana a la boda de su tío Marc Piqué no solo porque el convenio fija los días que han de pasar con su madre sino porque el mismo convenio incluye uns cláusula que impide a Clars permanecer en el masmo espacio que Milan y Sasha". Literalmente se dice que Shakira pacta con Piqué los vetos: "marca o regula quién puede estar en la casa y convivir con los niños", y fuera de casa, no se impide que Clara comparta espacio, pero en la familia, Clara vetada. Los niños la toman por una amiga del padre.
Ana Rosa insiste en que una cláusula tan leonina no puede haber pasado el filtro judicial, pero el cierto es que no hay una sola prueba documental que Shakira conozca a Clara ni que Clara conozca a los niños. Es "la otra" y no es cierto como han publicado y republicado medios inverosímiles, que Piqué y Clara se casen y que lo harán público en la boda del viernes, la del tío Marc. Ni boda, ni vida en común, ni hijos. Piqué sabe separar su vida sentimental con los niños. Ana Rosa, que también se casó en segundas nupcias con el hijo de su primer marido, Alfonso Rojo, no acaba de creerse que el juez admita esta cláusula como legal.
Clara ya tiene la ropa de invitada de la boda de su amiga, la mujer de Marc Piqué y lo que no tiene, los dos hijastros, también la alivia. Para ahogar las penas o para celebrar, aprovechando que Piqué estaba en Miami devolviendo a los niños, montó un encuentro de empleados de Kosmos en el bar más próximo a la empresa, el Bar Sideral de la calle Beethoven, dentro de la plaza Wagner donde hay un jardín de infancia y un parque infantil. Allí donde Piqué y Clara daban rienda suelta a su amor, ahora Clara luce look y sonrisa, es la triunfadora. La cláusula anti Clara es el cemento más fuerte para unirse a Piqué. Que Shakira la deteste es gasolina para la relación.