Shakira no ha escondido nunca que es una estrella mundial y que quiere ser considerada como tal. Millones de personas la escuchan, la siguen y compran entradas para sus conciertos, y eso aumenta el ego de la colombiana, que con 46 años acumula tantos éxitos que nadie la considera una estrella fugaz sino la más consolidada. Shakira se sabe triunfadora y su carácter sufre del mal del famoso: hablar de ella en tercera persona, considerar que los seguidores son una masa y maltratar al servicio. En Barcelona era un secreto a voces que era mejor no tropezarse con la pareja de Gerard Piqué. Se comportaba despóticamente con sirvientas, camareros, enfermeras y en general personas de servicio. Ya hace días que en Telecinco y Antena 3 dan voz a los exempleados de Shakira molestos con ella. Su profesora de baile, un modelo de sus videoclips, las enfermeras de las clínicas de bótox... y ahora le toca al chófer.
En Socialité de Telecinco hablan con un chófer que Shakira contrató durante diez días en Madrid. Le plantaron un contrato de 40 páginas a fin de que firmara las condiciones que le exigía la cantante:"No mirarla a los ojos, no hablarle, no dirigirme a ella bajo jingún concepto. Incluyendo exigencias peligrosas como girar el retrovisor central del vehículo hacia abajo, porque según ellos, podías tener la tentación de mirarla. El hermano de shakira, Tonino, se sienta en el asiento del copiloto, y te grita continuamente. Juega a que ella es ajena a la situación, cuando Shakira es totalmente consciente, y presencia de manera benévola, cada una de las situaciones negligente".
El chófer, que tampoco da la cara como el modelo que entrevistó Antena 3, insiste en denunciar que Shakira es tacaao: : "No dan propina, te piden encargos y que los adelantes tú de tu bolsillo y luego te ves prácticamente mendigándoles para que te devuelvan el importe que tú has anticipado de tu bolsillo para su capricho". Una de las fortunas mayores de la música y hace que el chófer le pague los encargos. Feo, innecesario y absurdo.
El entorno de Shakira está argumentando que todos estos exempleados están siendo movilizados por Gerard Piqué para que hablen ahora, como venganza por la canción contra el padre, Joan Piqué. Jordi Martín, el paparazzo de Vox enemigo de Piqué, argumenta que Piqué ha pactado con Telecinco vender a Mediaset los derechos televisivos de la King's League a cambio de dar voz a estas voces anti Shakira. Una falsa teoría de la conspiración. Sociatité hace años que se dedica a hacerlo sin cobrar de Piqué y Antena 3, que no tiene ningún contrato con el dueño de Kosmos, también da voz a exempleados que detestan a Shakira. No hay un interés oculto de Piqué. Shakira tiene otro problema: sus aires de diva cutre venida a menos