Shakira ha conseguido uno de sus mayores sueños, vivir en Miami. Se instaló en Barcelona para estar más cerca de Piqué y formar una familia. Una vez que nacieron Milan y Sasha decidió aparcar temporalmente su carrera artística para dedicarse enteramente a ellos, prioridades. Sin embargo, el exfutbolista no estaba dispuesto a renunciar a su profesión. Tras la ruptura, y al firmar la custodia de los menores, la cantante hizo las maletas y se marchó a Estados Unidos, donde ha regresado con más fuerza que nunca. Planea la publicación de un nuevo trabajo discográfico y ya ha publicado un total de seis canciones, todas ellas con notable éxito.
Sin embargo, en España Shakira continúa siendo investigada con lupa. A las causas que tiene pendientes este verano se le sumaba una más. La Hacienda Pública abría una nueva investigación por un segundo caso de supuesto fraude fiscal. Shakira ya estaba a la espera de un juicio aún sin fecha por supuestamente no pagar 14,5 millones de euros en impuestos por ingresos comprendidos entre los años 2012 y 2014, en los que según ella todavía no residía de forma oficial en España. Ahora un juez ha aceptado investigar dos posibles casos de fraude fiscal de Shakira en 2018.
El príncipe heredero de Arabia Saudí pagó millones de euros para que Shakira cantase en su fiesta
Shakira se ha visto involucrada en otro problema. El periodista de investigación de 'The New York Times' Justin Scheck ha hablado en laSexta Columna sobre el alto tren de vida del príncipe heredero de Arabia Saudí. Argumenta que le gusta comprar yates, mansiones y organizar las mejores fiestas del mundo. De hecho, uno de sus eventos se celebró en Maldivas, alquiló una isla entera para él y sus invitados secretos.
"Es una isla privada, extremadamente lujosa, y que, además, se anuncia como muy discreta. Organizó una gran fiesta allí para un grupo de amigos, amigos cercanos y familiares. Llevó un grupo de mujeres examinadas para detectar enfermedades de transmisión sexual... Había DJ y celebrities. Los medios locales de Maldivas se enteraron, escribieron sobre ello y reventaron la fiesta", relata Scheck.
Shakira fue una de las artistas contratadas a esa fiesta secreta. Acudió acompañada por Gerard Piqué. También estuvieron otros cantantes como Pitbull. Nunca trascendió absolutamente nada.