En casa Piqué-Mebarak son muy de celebrar fiestas y pasárselo muy bien. Es verdad que quizás no son los días más apropiados, ya que en el trabajo de Gerard las cosas no van precisamente bien. Bueno, uno de los trabajos, el principal: el Barça y su eliminación europea. Pero afortunadamente esta pareja tiene motivos para dejar los problemas fuera de casa, y no por el éxito profesional de la cantante colombiana y el futbolista y empresario catalán, no. Hay dos personitas que hacen de este hogar un lugar alegre y optimista: sus hijos Milan y Sasha.

Shakira, Piqué, Milan y Sasha / Instagram

Pues bien, después de haber celebrado Halloween de forma espectacular, ahora se acerca Navidad y todo empieza a teñirse de los colores, aromas y calor de estas fechas. También evidentemente de adornos de toda tipo, desde el típico árbol hasta la figurita más insospechada. Shakira ha querido compartir la última adquisición que han hecho y que hace las delicias de los pequeños de 8 y 6 años. Tienen un fiestón desde que cruzó la puerta del domicilio. Sí, de acuerdo, es un poco kitsch, pero hace Navidad, lo mires como lo mires.

El Santa Claus trepador de Shakira, Milan y Sasha / @shakira

Hablamos de esta figura del Papá Noel que tiene vida propia (siempre que no se agoten las pilas) y que se sube por las paredes cantando la típica 'Jingle Bells'. En el caso que nos ocupa, sube por el marco de un espejo cromado muy llamativo y que puede suponer un peligro en un día soleado. Milan y Sasha se tronchan de risa con el movimiento del Santa motorizado, y cuando salen de la imagen podemos descubrir también los clásicos calcetines colgados junto a la chimenea, esperando que se llenen de regalos de aquí unas semanas. Pero vaya, que tenemos la sensación de que falta algo importante, casi imprescindible. ¿Qué será?

Efectivamente, falta un tió, el típico leño catalán. Y no hemos sido nosotros los que nos hemos dado cuenta, sino una fan catalana de la artista que ha dejado un pequeño recordatorio entre la montaña infinita de respuestas que acompañan el documento gráfico. Una tradición tan arraigada como esta parece que no está presente en casa de esta familia, y es una lástima. Hacer cagar el tió es un momento mágico para miles y miles de familias. También podría ser que lo tuvieran pero no estuviera a la vista en esta ocasión, sobre todo porque Papá Noel prefiere ir escalando y nuestro querido tronco va a ras de tierra. Desde aquí hacemos un ruego a Shak: si lo tenéis, enseñadlo, como hizo Elena Gadel. Haréis felices a más de uno, empezando por la seguidora.

El Tió de Elena Gadel @elenagadel

Ya puestos a ver si cuando lo hacen cagar deja un buen puñado de suerte y victorias para los culés, que van muy necesitados. ¡Feliz navidad!