A pesar de lo que diga Bertín Osborne, que piensa que Halloween es "una fantasmada de pelotas", son muchísimas las familias en el estado español que celebran esta fiesta de tradición anglosajona. Es normal: todas aquellas festividades que impliquen disfrazarse y adoptar roles nuevos es muy golosa, especialmente para los chiquillos o los jóvenes que salen de marcha. A lo largo del fin de semana hemos visto fantasmas, muertos vivientes, brujas, calabazas y todo tipo de personajes terroríficos por todas partes. Todos se apuntan a una buena fiesta, es así. Incluso hay quien la vive tan intensamente que tiene preparados varios disfraces para cada día.
Es el caso de una de las parejas más famosas y mediáticas del panorama internacional: la formada por la cantante colombiana Shakira y su marido, el defensa azulgrana Gerard Piqué. Los dos se han dejado la piel para convertir la fecha en un momento mágico y especial para sus dos hijos, Milan, de 8 años, y Sasha, de 6. Primero vimos a la madre caracterizada como una bruja preparando la fiesta para los compañeros de la American School of Barcelona donde estudian sus niños. El que más llamaba la atención, sin embargo, era Gerard, con una elección que no era fácil de adivinar: no era uno de la serie 'El Juego de Calamar', sino un famoso y excéntrico disc-jockey que siempre lleva máscara.
SHAKIRA Y PIQUÉ CON EL PRIMER DISFRAZ DE HALLOWEEN:
Pues bien, al día siguiente volvía a haber fiesta. Y la temática escogida fue de zombies, llenos de sangre, cicatrices y todo tipo de detallitos para la ocasión. Shakira incluso iba un poco más allá, mezclando a la muerta viviente con una especie de licántropa. Sí, vaya, una mujer-loba. Bien, de hecho ella ya tiene experiencia en representar a este animal y sobre todo sus aullidos característicos, como demostró en uno de sus temas más conocidos: 'Loba'. En él canta "Una loba en el armario, tiene ganas de salir, deja que se coma el barrio, antes de irte a dormir". No se comió el barrio, no. Tenía otra preferencia.
No tuvo de salir de casa para saciar su apetito: hablamos de su pareja desde 2010, claro, Gerard Piqué. Aunque de vez en cuando algunas informaciones maliciosas digan que la pareja tiene problemas y que quiere partir peras, ni mucho menos: siempre demuestran armonía, afecto, cariño y devoción. Y como una imagen vale más que mil palabras, nos demuestran su amor con un beso en la boca. Bocas, labios y lenguas zombies, sí, pero el beso es muy real. No se han casado, es cierto, pero no hace falta: de hecho superan con creces aquello de "hasta que la muerte os separe", porque ellos, incluso "muertos", se aman como adolescentes. Shakira le dice: "I Know What You Did Last Halloween", sé qué hiciste el pasado Halloween. Nosotros ahora también.
Esto es un beso de película. De miedo, de acuerdo, pero aun así da gusto.