Shakira parece feliz en su nueva vida lejos de Barcelona. Miami me lo confirmó. Tiene a sus hijos bajo control, ha recuperado antiguas amistades y le salen pretendientes a cada paso, y lo más importante: Gerard Piqué y Clara Chía no forman parte de su paisaje cotidiano. Misión cumplida. Ahora bien, el fantasma del exfutbolista no desaparece, ni mucho menos. Tampoco los conflictos entre abogados y, podría ser, con la justicia. El videoclip 'Acróstico', la nueva canción de la colombiana dedicada a Milan y Sasha, ha reabierto la guerra. Utilizó la imagen de los chiquillos sin consentimiento ni aviso a su padre, una licencia arriesgada e hipócrita: hace pocos meses se quejaba de la aparición de los niños en las tertulias de la Kings League. Shakira aplicando la ley del embudo. La batalla no se acabará nunca.

Este traspié demuestra una realidad: el rencor no ha desaparecido y eso le hace cometer errores. Surfear la ola de la separación requiere mente fría y calculadora, y cuando te dominan las ganas de venganza lo más probable es que te pegues una leche importante. Veremos cómo acaba este nuevo frente, que llega en un momento de aparente calma en el tempestuoso mar que separa a los examantes. Sí, hacemos muchas referencias marinas, náuticas y surferas porque de eso va hoy la cosa: de un hobby que, durante los años felices de amor y sintonía, llenaba de gozo el hogar de los Piqué Mebarak.

Shakira, Milan y Sasha haciendo surf / @shakira

Shakira, Piqué y el surf, los años felices

El surf ha sido la válvula de escape de Shakira durante sus años en Barcelona. Siempre que tenía oportunidad se largaba a Cantabria o a Euskadi para practicarlo en familia. Gerard también participó en alguna de estas escapadas, aunque acabaron mal. Unos fotógrafos los pillaban en la playa de Oyambre y el exculé, según El Diario Montañés, se enfrentaba a los periodistas y exigía que borraran el material gráfico. No fue así, y desde aquel momento el catalán dejó de acompañar a sus seres estimados en estas ocasiones. Tiene gracia la cosa porque, una vez confirmada la separación, Shakira siguió haciendo surf en Cantabria. Allí fue inmortalizada con un hombre guapo, rubio y atlético que no era Piqué. Muchos dijeron que era una nueva ilusión, pero la realidad era mucho más decepcionante: era un monitor contratado.

Piqué y Shakira haciendo surf en Cantabria / Diario Montañés

El vídeo de Shakira dominando las olas en Miami que arrasa

Un monitor que, eso sí, enseñó bien a Shakira, que se ha convertido en toda una experta en la materia. Un hecho que hemos comprobado hace pocos minutos con el vídeo de la colombiana que arrasa en redes. La vemos dominando las olas de la costa de Miami de una manera singular: no son naturales, sino generadas por el motor de una embarcación a pocos metros de la cantante, que no pierde su rastro. Demuestra maña, es así. Bravo. ¿Algo bueno te ha dejado el tiempo en Barcelona, ves, Shakira? No todo es amargura.

Shakira no tiene miedo de las olas ni de los tiburones. De hecho lo único que debe temer es a ella misma.