Ahora Leo Messi vive en Miami, donde juega en el Inter de aquella ciudad al lado de sus amiguis Jordi Alba, Sergio Busquets o Luis Suárez. Un equipo donde también juega su hijo mayor, Thiago, en las categorías inferiores. El mejor jugador de la historia está acabando su carrera en el conjunto norteamericano después de una trayectoria absolutamente increíble, habiéndonos regalado a todos los aficionados al fútbol en general, y a los culés, en particular los mejores años de nuestras vidas. El currículum del '10' es excepcional, genio absoluto, mito de este deporte y lo que decimos, el mejor de todos los tiempos. Quién le tenía que decir a aquel niño menudo argentino que llegó a la Masia y que tenía problemas de crecimiento, que años después se convertiría en quien es hoy, siendo el mejor, habiéndolo ganado todo, todos los títulos posibles, tanto con el club de su vida, el Barça, como con su querida selección argentina: Mundial, Balones de Oro, Champions, títulos a tutiplén, habiendo marcado goles de todos los colores y en el terreno personal, habiendo formado una familia preciosa con su mujer Antonela y sus tres hijos, Thiago, Matteo y Ciro.
Una vida perfecta, de película, un sueño hecho realidad... que casi estuvo a punto de no ser nada de nada... Y por culpa de unos catalanes. Pero vayamos por partes. Cuando Messi era muy joven, cuando iba con aquel look con el pelo largo, melena al viento, había al mismo tiempo un grupo de música que curiosamente, también llevaba el pelo como él en aquella época, en la época en la cual empezaron a hacer música. Estoy hablando de los maravillosos Sidonie.
La banda de Barcelona, formada por Marc Ros, Axel Pi y Jes Senra, a juicio de servidor de ustedes, el mejor grupo que tenemos en nuestra casa. Sé que no soy subjetivo, sé que tengo devoción por ellos, pero es que ya tardáis en poneros su música si es que todavía habéis tenido la poca vergüenza de no haberlos escuchado antes. Banda sonora de la vida de muchos de nosotros y de nuestros hijos, que han heredado la pasión, los Sidonie hace muchos años que tocan, y con el tiempo, han ido forjándose una carrera descomunal, con discos y canciones que son obras de arte, como el último que han sacado, el homónimo Marc, Axel y Jes, que justamente este viernes, coincidiendo con el cumpleaños de Marc, tocan en el Sant Jordi Club en un concierto en el marco del Cruïlla invierno que los fans estamos impacientes por que pasen las horas y sean ya las 21 de la noche. Unos Sidonie que este año, en el 2025, publicarán su primer disco en catalán íntegramente.
Con motivo del fin de gira, Marc ha mantenido una conversación deliciosa para el diario As. Futbolero, aparte de músico, reconoce que desde que se fue Pep Guardiola del Barça, "me ha dejado de interesar bastante el fútbol. Ahora sé que están los chavales jugando muy bien y tal, pero no tengo esa emoción que tenía". Dentro del mismo grupo, rivalidad sana entre Axel y Jes, porque el primero es del Europa (como servidor, escapulado para siempre) y el segundo del Sant Andreu ("están 'peleados' con eso porque hay más rivalidad entre esos equipos que en un Madrid-Barça. Yo soy socio del Begues, el club del pueblo de mi madre, en el Baix Llobregat, dice Marc). Unos Sidonie que han recordado cómo estuvieron a punto de cambiar la historia, cuando menos la del fútbol, cuando eran jóvenes... Y tiene que ver con Leo Messi.
Y es que como recuerda el mismo cantante de Sidonie, un día que volvían de gira desde Zaragoza, casi pasa una desgracia. Llegaron a Barcelona, y cogieron por la calle Marina, ya que por allí tienen su local de ensayo... "Ahí la furgoneta pilla un poco de velocidad y es una calle larga, sin semáforos, pero en uno de los pasos de cebra está cruzando un grupo de gente. No nos dimos cuenta, al final pegamos un frenazo para no atropellarlos, hubo gritos, un poco de bronca...". Momentos de tensión y confusión, de susto máximo por lo que podía haber pasado... Marc recuerda que no se quedó aquí la cosa: "cuando me giré para ver quién había cruzado, resulta que uno era Messi. Llevaba el look aún del pelito largo, era muy joven. A punto de matar a Leo Messi, ¡imagínate lo que sería la vida ahora!", dice riendo y respirando aliviado... Unos Sidonie que en sus conciertos actuales cierran con un temazo, No salgo más... No salgo más... de casa, es lo que debieron haber pensado si llegan a atropellar al argentino... Leo Messi y Sidonie, maravillosos.