Ya hace algún tiempo que se alejó de la televisión convencional, pero es inevitable tenerla en mente cuando se habla de telerrealidad. Ella, una jovencísima Sofía Suescun que con solo 19 años entró en la casa de Guadalix de la Sierra para concursar en la decimosexta edición del Gran Hermano. El último que Mercedes Milá presentó y una de esas temporadas que dejó muchos personajes para el recuerdo. Uno de ellos es la inigualable Maite Galdeano que, para los más desconectados del universo Telecinco, es la madre de Sofía. Ella fue la primera expulsada de la edición, mientras que su hija ganó el maletín de 300.000 euros. Y de ahí, al estrellato televisivo.

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Sofía Suescun y Maite Galdeano, presentación en GH 16. / Telecinco

Estrellato económico, también, porque si alguien ha sacado rédito a los 'realities' de Mediaset ha sido la pamplonesa. También ganó Supervivientes frente a Logan Sampedro unos años más tarde. Ha pasado por mil y un formatos más, a destacar su trono en el extinto Mujeres y hombres y viceversa o su no tan prolífico concurso en Gran Hermano Dúo junto a su ex Alejandro Albalá. Un tiempo después, según apuntan las malas lenguas —y por lógica aplastante—, Sofía fue vetada de la cadena.

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Sofia Suescun gana Supervivientes 2018. / Telecinco

Un veto que no le ha supuesto demasiado problema, porque ahora está centrada en su etapa como 'influencer'. Cerca de un millón y medio de seguidores son los que tiene únicamente en su perfil de Instagram. La 'reina de los realities' lleva ahora una vidorra que muchos quisieran. Eventos, viajes y lujos. Casa de diseño en la que le cabe el novio, el perro e incluso su inseparable progenitora. Y todo lo muestra a través de sus redes sociales, que para algo trabaja de esto.

Sofía Suescun cuenta todo sobre su retoque estético

Como es ya un constante en cualquier famosa de Internet que se precie, Suescun cuenta sus aventuras y desventuras a través de las publicaciones y 'stories' de su cuenta. Amada y odiada a partes iguales, en muchas ocasiones es difícil que sus movimientos queden exentos de polémica. Recientemente, hacía público un dato jugoso a más no poder, y es que a la edad de 27 años ha considerado que ya se encuentra en el momento propicio para empezar a cuidar su rostro. Cuidarlo con cirugía estética, está claro. El dinero mueve montañas y hace desaparecer arrugas. Con una fotografía después de someterse a los pinchazos, ha escrito: "Esto es fuerte para mí. Me he 'desvirgado' en cuanto a botox y ácido hialurónico. Ya son 27 años y se nota. Estoy deseando enseñaros qué me he hecho". 

Aluvión de críticas ante la decisión de la 'influencer'

Como anticipa el tuit recogido arriba, su decisión no ha conquistado a la audiencia. Más bien todo lo contrario, porque le han caído críticas a diestro y siniestro que la acusan de andar "creando complejos". Los internautas de la red social X lo tildan de "vergonzoso", creen que el post "sobra" y que "debería percatarse que muchas niñas y gente joven toman ejemplo". Otros son más duros, y dicen que quizás lo que se nota es "la falta de oxígeno". No hay tregua.

"Dejad de hacer famosa a gente estúpida", sentencia una de las respuestas. Sofía, Sofía. La próxima vez no digas nada, mujer. Si total, todo el mundo se retoca, pero mejor no abrir debate. No le queda otra que el dientes, dientes.