Sofía Suescun vuelve a nuestras vidas. La exestrella de Telecinco y ganadora de realities hace tiempo que no aparece por la cadena que la hizo famosa. Paolo Vasile la expulsó del paraíso por no querer entrar en la empresa de representación de VIPS que acababa de montar. El italiano quería controlar el negocio y no hacía amigos, no. Pero la navarra sí que hizo números. Ganaba más con sus followers que en los programas y encima se ahorraba el circo de la tele. Bueno, a medias. El universo de Sofía es un circo de tres pistas, con la madre Maite Galdeano, el hermano Cristian y el novio Kiko Jiménez. Todos personajes de la cadena, protagonistas friquis de tramas diversas y muy lucrativas. Un complemento a la pasta gansa que factura ella haciendo anuncios de todo tipo de productos y firmas. Cogió la puerta y se marchó tan contenta.

Un veto que originalmente no afectaba a su tropa, pero tanto su madre como su hermano iban de capa caída. Quien mantenía mínimamente el estatus era Jiménez, tertuliano de 'Sálvame', cada vez de manera más intermitente. De hecho se le ha visto más bien poco desde que estallara un escándalo de promoción de servicios de prostitución desde su cuenta en Instagram. La agencia de la madre de Dulceida, Inmanagement (agencia también de la Suescun) fumaba en pipa, y el teléfono de Telecinco sonaba cada vez menos. No estuvo en el final de 'Sálvame'. Pero mira por dónde que quizás sí que está en el del 'Deluxe'.

Sofía Suescun y Kiko Jiménez, ayer mismo / Instagram

Sofía Suescun se marca un Merlos 2.0

Sí, porque estamos asistiendo a una jugada maestra. Si sale bien y alguien la compra, claro. De momento no va mal, porque personajes de 'La Fábrica de la Tele' están enloqueciendo con la historia. Así, de primeras, es un escándalo total. La segunda parte del Merlosgate, aquella aparición de la periodista Alexia Rivas en bikini por la casa del periodista ultra mientras hacía un directo durante la pandemia. Alfonso Merlos, sí, tenía pareja, la colaboradora Marta López. Ay, qué recuerdos. De lo mejor del confinamiento, sin duda. Pues bien, esta segunda parte la protagonizan la Sofi, un tipo que se llama Noel Bayarri y que tiene tela marinera, y un Kiko Jiménez ausente que, a estas alturas, no ha dicho palabra. Se trata de unos vídeos que han aparecido fugazmente en la cuenta de la de Pamplona, y lo que queda patente es que entre ellos hay muuuucha confianza. Vaya, que parecen novios. Y novio, hasta ayer mismo, solo tenía uno: Kiko.

Sofía Suescun con Noel Bayarri / Instagram
Noel Bayarri y Sofía Suescun pasean al perro / Instagram
Noel Bayarri besa a Sofía Suescun / Instagram

La influencer, infiel a Kiko Jiménez, ¿pifia o montaje burdo?

Escena 1: Sofía se lava la cara con un producto para los granitos y, al fondo de la imagen, aparece el tal Noel, ex de 'Mujeres y Hombres y Viceversa' y estrella del equipo Porcinos de Ibai Llanos en la Kings League, saliendo de la ducha con una toalla de una manera teatral pero sospechosa. Escena 2: la parejita pasea por un parque con unos de los perros de Suescun, acaramelados. Demasiado. Y la tercera: ella lo recoje en coche y el beso que se dan no es el de un colega, no. Así explicado es fuerte, carne del Deluxe. Quedan pocas balas y hay que aprovecharlas. Pero cuándo lo ves en vivo y en directo, es tan extraño, forzado y delirante que tiene una pinta de montaje descomunal. Noel no es buen actor, y si es así en la vida real... vaya. Núria Marín y Miguel Frigenti se lo tragan, de momento, y explican que la aparición y desaparición de los vídeos ha sido muy rápida, que Sofía se dio cuenta de "la pifia" y lo eliminó. Tarde, claro. Ya le va bien.

Sofía y Kiko quieren su despedida en Telecinco. Cerrar su era a lo grande. Es eso o se le ha ido la olla del todo.