Sofía Suescun está de estreno. Una cara nueva a sus 27 años: se ha operado la nariz. Mejor dicho: se la ha rehecho completamente. La influencer y exestrella de Telecinco ha pasado, asegura, por primera vez en su vida por el quirófano de un cirujano estético. El primer retoque, más allá de pincharse ácido hialurónico. Pues ha entrado por la puerta grande en el siempre movido mundo de los cambios de aspecto, aunque ella sonríe, es feliz y no las está pasando canutas como la Pelopony, que se marchó a hacerse un completo a Estambul y mira cómo ha vuelto. No, la Suescun solo ha probado la rinoplastia, una ultrasónica, y en Tenerife. No ha habido inconvenientes ni problemas desde el 26 de enero, día de la intervención, y esta mañana era el gran día.

Sofía hacía días que enseñaba una férula facial en sus vídeos promocionales. Las secuelas de la operación eran visibles, aunque la técnica utilizada, aseguran los entendidos, es mucho menos invasiva y más precisa. Ella tenía muchas ganas de verse en el espejo y, por qué no decirlo, compartirlo con sus millones de seguidores. Un peligro, por otra parte, porque ya sabemos que las redes tienen mala leche. Por cualquier cosa te matan, pues imagínate con un cambio de imagen como este. Pero hay que decir que el carácter de esta familia, los Suescun Galdeano, es particular y a prueba de bombas. Les resbala todo. O casi.

"Me habían dicho que no fuera con muchas expectativas a este momento porque podría verme rara y demás, sin embargo me ha encantado", escribe la navarra en Instagram, compartiendo el vídeo de la presentación oficial: Sofía y su nueva nariz. Con un espejo en las manos y la boca abierta como un buzón de correos, la paciente está totalmente entusiasmada. Diálogo de calidad: "Pensaba que me iba a ver de frente más extraña". El doctor: "Sigues siendo tú, pero muy mejorada". Ella: "Ayyyy, qué perfil, me gusta". Él: "Parece una nariz de fábrica". Tan contenta y satisfecha ha quedado la cliente que llega a compartir una comparativa con su yo anterior. Hace un poco de trampas porque no sería su mejor foto, pero no quiere desmontar su tesis: "Ayer comparamos estas fotos en la clínica y flipamos todos mucho. La verdad que si no veo la nariz de antes ya ni me acuerdo de cómo era"

Sofía Suescun viendo su nariz nueva / Instagram
Sofía Suescun / Instagram

Vaya, pues la gente sí que la recuerda, tu antigua napia. Y mira, les gustaba y la añorarán. La nueva versión de ti misma no convence nada, cosa que seguramente no te importará un rábano, de momento, pero la gota malaya erosiona, cansa y hace reventar. ¿El comentario general? "Me gustaba más la nariz de antes". También el "no te hacía falta". Claro que hay quien la aplaude, especialmente profesionales del mundillo o la gente de su familia, que la consideren una actriz "de Holibut". Pero con respecto al populacho, en otras palabras followers, la impresión no es buena. Ahora no tiene remedio, eso sí. O sí: una nueva visita a Tenerife, bisturí, y ea. A probar suerte.

 

Sofia Suescun antes de operarse / Instagram