La publicación de la noticia de la separación matrimonial de Susanna Griso lo ha pillado haciendo vacaciones. Hasta que no vuelva a Antena 3 pasado Festes no podrá decir cómo se siente. La revista Hola, bien conectada con la presentadora catalana, obtuvo su única reacción: "Sí, estamos en un paréntesis de pareja". Separados pero todavía no divorciados.
La única reacción vía twitter del todavía marido ha sido neutro, pero se le ha llenado la red de muestras de apoyo por el mal trago de separarse por Navidad. Otra publicación, LOC, ha ido a las mejores fuentes: el entorno de los afectados. Un amigo íntimo de Griso en Madrid da las claves: "Se han separado de mutuo acuerdo, todo ha sido pactado y se sean queriendo, por eso van a celebrar las navidades con los niños".
Los quienes temían una infidelidad o similares como a causa de la ruptura pueden estar tranquilos. A la crisis conyugal de Griso se le aplica un clásico de la prensa rosa: "No hay terceras personas". El motivo, según otra amiga de Barcelona es el paso del tiempo: "Es lo que ocurre cuando llevas tantos años (23 de casados) de relación. Se han separado de manera impecable". La separación es de común acuerdo pero no ha trascendido quién de los dos ha tomado la iniciativa de reconocer el fracaso matrimonial.
Se publica que los tres hijos Jan (17 años), Mireia (14 años) y Dorcette (6 años) están adaptándose a la nueva situación, especialmente la pequeña. A Griso, periodista, no le ha gustado que se publique la noticia: "No le gusta que haya salido ahora porque la separación la han llevado discretamente y parte de su familia ni tan siquiera lo sabía". Griso es la pequeña de siete hermanos. Algunos se debieron enterar por la prensa rosa.