Susanna Griso está viviendo uno de los momentos más felices de su vida. Los espectadores de Espejo Público siguen sin poder verle la cara, pero ya les digo yo que tendrá una sonrisa de oreja a oreja. La presentadora catalana ya tiene entre sus brazos a su hija adoptada de la Costa de Marfil. Griso, su marido y sus dos hijos, Mireia y Jan, han viajado la semana pasada hasta aquel país para encontrarse definitivamente con su nueva hija y traérsela a casa. Ha sido el punto final a un largo proceso que ha durado 8 años, un "embarazo largo y duro, como ella decía recientemente" y que a veces parecía que no verían nunca la luz.
Con una vida ajetreada, llena de compromisos profesionales y donde el día a día la consume, la llegada de la pequeña a la familia supone una inmensa alegría para una mujer que hace sólo unos meses, en noviembre del año pasado, pasó por una de sus peores épocas al morir su madre, Montserrat Raventós, a los 94 años. La misma Susanna Griso ha publicado una fotografía, la primera, de ella con su hija. Si bien, ha preferido seguir manteniendo en el anonimato la cara de la pequeña y lo que ha hecho es fotografiar su delicada mano, junto con la suya. Una imagen tierna y emotiva de madre e hija, que a partir de ahora ya no se separarán:
Como se puede leer en el post, Griso llevaba tanto tiempo buscándose con su hija que no veía el día de tenerla entre sus manos. Una imagen que han celebrado sus amigos y seguidores en las redes:
Esta semana los espectadores de Antena 3 han visto cómo la sustituía al frente del programa Lorena García Díez, que ha sido la encargada de analizar, entre otras noticias destacadas, la vergonzosa sentencia a los miembros de 'La Mandada', en ausencia de Griso.