Espejo público ha entrado en una vorágine anti-independentista en competición con El programa de AR. Las dos reinas de la mañana se tiran del pelo por un punto de share. Hasta ahora se arañaban por una exclusiva sobre Marta del Castillo, pero ahora lo hacen por Catalunya. Susanna Griso está ganando en audiencia lo que está perdiendo en ecuanimidad. Ser catalana empieza a suponerle un problema y para hacerse perdonar el pecado original se olvida de los principios del periodismo. En su último programa dio voz a una estudiante que denunciaba supuestas listas de estudiantes no independentistas a la UAB. El problema viene de hacer creer que has hurgado en periodismo de investigación y omitir un detalle sin el cual la denuncia no puede entenderse. La chica que pretende pasar por universitaria anónima es en realidad una activista de Ciudadanos y de Sociedad Civil Catalana. Su denuncia era esta:
"Se nos escupe, abuchea y se nos llama fachas". La joven de C's confiesa que quiere marcharse de Catalunya pero antes pasa por Antena 3 para hacer el caldo de cultivo al anti-independentismo con música de pena y una advertencia sobre fondo negro para recordar que se graba en un bar y no en el campus "por temor a represalias". El drama sobre las doce y media del mediodía atemorizaba a quinientas mil amas de casa en España (16,8%)
Indignación entre unionistas creyendo que se raja la cara a jóvenes en los campus universitarios e indignación entre independentistas por la manipulación, ocultación y fraude que entienden que desplegaba Espejo público. La denunciante de los rizos está tan politizada que parece la sobrina de Inés Arrimadas.
Esto ha desencadenado la ira de los independentistas contra Griso, que ha tenido que leer calificativos insultantes por ocultar el juego político que había detrás de su "reportaje de investigación". Riñas de bar entre migueletes, los mercenarios de la Guerra de Successió: Iceta contra Calçada.
Pero lo que de verdad debe herir a la expresentadora de los Telediarios de TV3 es como en su casa no le perdonan este "reportaje" con palabras muy gruesas:
Griso podría hacer un homenaje a Catalunya y a otra catalana cèlebre: Mercè Rodoreda. El próximo Espejo público debería titularse Espejo roto.