A Suso de Toro hace falta leerlo y escucharlo siempre. El escritor gallego y colaborador del Tot es mou de TV3 es una de las mentes más lúcidas del panorama actual, y su finezza a la hora de atizar comportamientos retrogrados y represores, que especialmente tanto se estilan en las Españas. ¿El penúltimo? Poniendo en su sitio a los Vargas Llosa, Losantos y compañía por una nueva muestra del odio que le tienen a cualquier lengua que no sea el castellano.
Suso de Toro y Mario Vargas Llosa
Ahora, a quien ha peinado es a Pedro Sánchez por un gesto que se ha vuelto a repetir y por una imagen que a pesar de tener un tiempo, todavía le remueve por dentro. El presidente del gobierno ha vuelto a Montauban, acompañado del presidente francés, para visitar la tumba de Manuel Azaña en esta ciudad del sur de Francia donde el último presidente de la República española, enfermo, exiliado y perseguido por la España franquista, y asediado por la Francia de Vichy, murió el año 1940.
Pedro Sánchez y Emmanuel Macron en el homenaje a Azaña (Efe)
Y Suso de Toro lo ha aprovechado para hacer una reflexión demoledora sobre el paripé de Sánchez y ha definido, gracias a este acto, lo que es la democracia española. Sólo ha necesitado tres verbos y una referencia a otra imagen de Sánchez, un par de años atrás, con una corona en la tumba del mismo Azaña. Esta es la imagen:
Pedro Sánchez en la tumba de Azaña (Efe)
Y este el comentario lapidario de De Toro:
Una definición compartida por la red:
Someter, imponer y humillar a los vencidos... Brutal Suso de Toro.