La nueva edición de Supervivientes arrancaba con fuerza después de que Telecinco, avanzaba su estreno ante el desastroso éxito de Gran Hermano DÚO. Unas cifras que tan solo podía remontar el concurso de supervivencia y, de momento, así ha sido. El retorno de Jorge Javier Vázquez daba un impulso al concurso consiguiendo captar a los espectadores más fieles de la cadena, y es que, a raíz del fin de Sálvame todo el mundo añora a sus protagonistas y sobre todo, al presentador mítico de la cadena. El concurso se adelantaba casi un mes antes, con un casting nuevo y diferente, no había demasiados personajes que sorprendan, sin embargo, sin lugar a dudas, todo el mundo tenía claro quién sería la estrella de la edición, Carmen Borrego. Y no referimos a su talento para pescar o por su destreza en las pruebas, ella es una concursante de aquellas que arman sermones, que llora, que no quiere hacer nada, una palmera más de Cayo Paloma. Esta es su magia, ser carne de meme y burla por la red.
Carmen Borrego empezaba el drama en el minuto uno, resulta que no le gustan las alturas, ni los aviones y digamos que, saltar desde un helicóptero no le llamaba nada la atención, todo al contrario, le daba un pánico terrible. Parece irónico que se pusiese a llorar cuando llegaba su turno para saltar, se trata del primer requisito que el programa pide a los concursantes. Pero bien, está claro que ella no ha ido al concurso con la ilusión de ver fauna marina o hacer fuego, ella ha ido por el gran sueldo. Tal como dice el refrán catalán, La pela es la pela. Finalmente, y una pizca por obligación, protagonizaba el gran salto desde la altura mínima y con un emotivo vídeo de su hermana Terelu Campos llamando y animándola desde el sofá. Amor de hermanas. Después de superar este reto digamos que la Borrego ya tuvo lo bastante, llenó el cupón de expectativas, porque desde entonces no quiso hacer ninguna prueba más. Como bien dijo Nagore Robles durante el último programa, ella es la manzana podrida de la frutería.
Después de tres galas, y solo un par de pruebas hechas (sin ningún tipo de éxito) ayer el Debate arrancaba con una noticia que cambiaba todo el concurso de La Campos. "Carmen Borrego no está junto a sus compañeros en la playa" comunicaba Laura Madrueño a la presentadora del plató y el equipo el programa. La hija de María Teresa Campos llevaba aislada desde el jueves, el último día de gala donde después de la emisión del programa empezaba a marearse, asegurando que se encontraba fatal. El equipo médico se lo llevaba al hotel y justo al día siguiente devolvía en playa Condena con sus compañeros, pero por tan solo unas horas, ya que por la tarde sufría un ataque de ansiedad y llantos que la hacían subir a la barca mientras decía a la cámara "Por favor, no puedo más. Me estoy muriendo. Os lo juro por Dios que no puedo más, os lo ruego. ¿Más no puedo hacer, me subo a la barca y me voy" y desde el viernes hasta el domingo, cuando, Sandra Barneda conectaba con ella para preguntarle sobre su estado, y para hacerle la pregunta clave, ¿Abandonaría Supervivientes?
Al verla ya sabíamos todos que había estado haciendo aquellos días: comer y fumar todos los cigarrillos posibles. Con una sonrisa tímida, y físicamente bien, explicaba el susto que había sufrido durante aquellos días. Atentos. Se echaba a llorar explicando que, el verdadero revuelo lo tenía a la mente. "El problema no es que no me dé fuerzas, pero ¿yo he sido capaz de sacar fuera lo que ha sido ella para mí? La mente se me ha ido fuera y se me ha ido muy arriba" el recuerdo de su madre la hunde por momentos y, no, el problema no es pasar hambre, el asunto ha sido culpa de la ansiedad y la angustia. Seamos sinceros, pasar el luto con un buen plato en la mesa seguro que es mucho más fácil que en una isla desierta sin comida. Por este motivo, después de enjugarse las lágrimas y de haber probado algún trozo de pan para darle fuerzas, pronunciaba la frase por excelencia. "Sé que no estoy condiciones, pero me gustaría intentarlo más porque si me toca irme lo haré con mucha pena"
Según el prospecto médico, Carmen Borrego estaría sufriendo un cuadro de ansiedad a causa de su inadaptación, por eso ha sido atendida por el equipo médico y la psicología. La hija pequeña de María Teresa Campo ha servido drama y folklorismo desde el minuto uno, y aunque no sea la superviviente con más destreza, ella es, sin lugar a dudas, la más comentada por la red. Tenemos memes y burlas para muchos días.