Tamara Falcó está agotada de enfrentarse siempre a la misma pregunta en cada evento al que asiste. Desde que se casó con Íñigo Onieva, el tema de su futuro embarazo ha sido recurrente. Los rumores sobre un posible embarazo han circulado en numerosas ocasiones, pero tras un año de matrimonio, aún no ha logrado concebir. Ella es consciente de que, a su edad, el proceso puede ser más complicado. La marquesa de Griñón, que celebrará su 43 cumpleaños en noviembre, podría convertirse en madre primeriza, pero tiene claras sus convicciones. No está dispuesta a recurrir a métodos de fertilización asistida, ya que prefiere que el embarazo ocurra de manera natural, dejando que, según sus creencias, sea la voluntad de Dios.
Durante una reciente aparición ante la prensa, Tamara comentó que está bajo el cuidado de una médica en Barcelona. "Me estoy cuidando", dijo cuando le preguntaron si estaba recibiendo tratamiento en una clínica. Añadió que la doctora le ha hablado de varias opciones que se alinean con sus valores. Como colaboradora de *El Hormiguero*, la hija de Isabel Preysler también mencionó que su madre está muy emocionada con la posibilidad de ser abuela. "Ella quiere que Íñigo y yo tengamos un hijo, pero si no sucede, es porque no está destinado para mí", confesó. En cuanto a su relación con Íñigo, aseguró que todo marcha perfectamente: "Esta noche no pudo venir porque tenía una reunión, pero estamos muy contentos."
Tamara Falcó deja caer que el principal problema recaería en Íñigo Onieva
Las recientes declaraciones de Tamara también han generado especulaciones sobre la fertilidad de Íñigo Onieva. Al respecto, ella explicó que ha probado varios métodos para mejorar su salud, incluyendo cuidados con Xavi Verdaguer y otras opciones recomendadas por su doctora. Aunque la fecundación in vitro podría ser una opción más rápida, Tamara insistió en que sus creencias religiosas limitan las posibilidades que está dispuesta a considerar.
Sin embargo, Tamara dejó claro que la responsabilidad de no haber concebido aún no es solo suya. Durante su participación en *El Hormiguero*, mencionó que Íñigo también está entusiasmado con la idea de ser padre, pero insinuó, de manera algo tímida, que él también tiene un papel importante en este proceso. "Íñigo me va a matar… porque claro, él también tiene que hacer cosas", dijo, sin querer ahondar más en detalles sobre el empresario.
Estas palabras han llevado a algunos a preguntarse si Íñigo podría tener algún problema relacionado con la fertilidad. Después de todo, como suele ocurrir en estos casos, la "culpa" no siempre es solo de la mujer; los hombres también pueden enfrentarse a dificultades en este tipo de situaciones.
Tamara Falcó está siguiendo todos los consejos a rajatabla. Por ejemplo, las posturas que se adaptan a la hora de concibir a un bebé son varias. Algunos especialistas sí que recomiendan que, tras la eyaculación, la mujer esté unos 5-10 minutos acostada boca arriba para facilitar el acceso de los espermatozoides al interior del tracto femenino. Las posturas más recomendadas son la típica y básica del misionera y la cuchara.