A las 20:14 horas de este sábado, con 45 minutos de retraso y vestida de Carolina Herrera con un velo gigantesco, Tamara Falcó se ha casado con Íñigo Onieva. Es oficial. Finalmente la ceremonia ha tenido lugar en las caballerizas de la finca El Rincón, en vez de la pequeña capilla del complejo, donde no caben más de 10 personas. Poco espacio si quieres meter a los novios, 3 curas, los padrinos, la Preysler, los testigos, los que leían, la familia política, el diseñador Wes Gordon de CH, etcétera. Imposible, de hecho. Los que han salido ganando han sido el resto de invitados, entre los que finalmente no estaba la infanta Elena, que se han podido acercar un poco más a la acción en vez de seguirlo por pantallas.

Otras pantallas han sido, sin embargo, responsables del primer susto del nuevo matrimonio. Alguien se ha saltado las normas estrictas con respecto a las fotos y los teléfonos móviles. En teoría están prohibidos, aunque hay gente que no ha hecho caso. De hecho, Julio José Iglesias avisaba en el programa 'Y ahora Sonsoles' de Antena 3 que no pensaba cumplir la orden. Tampoco lo ha hecho un amigo del novio, según informaban hace unos minutos en el especial de Atresmedia sobre la boda, de que era un 'curri', el nombre del grupo de Íñigo. ¿Gracia? ¿Venganza? Se puede ver de diferentes maneras.

Tamara Falcó llega a la boda / GTRES
Íñigo Onieva llega a la boda / GTRES
Isabel Preysler y Chábeli llegando a la boda / GTRES
Julio José Iglesias llega a la boda / GTRES

Un amigo de Onieva se salta la prohibición y pone en riesgo la exclusiva más bestia

La imagen que ha llegado al programa ponía en riesgo la exclusiva de 1'6 millones de euros, roza la tarjeta roja. Pero se queda en amarilla, no hay contenido delicado. Se ve la espalda de una invitada, Vicky Martín Berrocal, y un grupo de personas que se dirigen hacia una carpa. Se especula con que se trataría del espacio donde dejar los terminales y acceder a la fiesta, pero no está claro. En todo caso es una traición, y quizás se la merece y todo: Onieva hizo lo mismo en la boda de Isabel Junot, prima de Tamara, estropeando la exclusiva. A Íñigo no le llega la camisa al cuello; el día ha empezado movido, ha continuado intenso y ahora empieza el baile. En todos los sentidos.

Sonsoles Onega enseña la imagen de la boda / Antena 3

¿Gracia, venganza? Mal rollo entre los amigos del novio, ha dejado a mucha gente fuera

No dejaremos pasar la otra hipótesis, la de la venganza. Hay mucha gente que se ha quedado fuera, amigos de la parte del novio que no han podido acompañarles por una decisión inverosímil: todos aquellos que no estuvieran casados o con fecha para hacerlo, descartados. Así lo aseguraban en Telecinco, añadiendo que había mal rollo. Y no solo entre los afectados, también entre los que se solidarizaban con ellos y sí han podido estar en la boda. Quizás es un toque de atención, una pulla amenazadora. Todo podría ser. El caso es que ya hemos podido ver algo, ya era hora. Nos lo merecíamos también, ¿verdad que sí?

La boda de Tamara i Íñigo / Antena 3

¡Pendientes de si sale el gordo antes que 'Hola!' llegue a los quioscos. Será la guerra.