Los Preysler dejan a todos sin palabras. Toda la familia podría protagonizar un reality. A pocos días de acabar el año, uno de los peores para el amor en el mundo de la farándula, Isabel Preysler anunciaba su ruptura con Mario Vargas Llosa, algo totalmente inesperado, supuestamente por los “celos infundados” del escritor. Él da otra versión, pertenecían a mundos opuestos. La reina de corazones volvía a generar interés después de haber vivido los últimos años a la sombra de Tamara Falcó. Pero tan solo una semana después, la primera gran noticia del 2023, la marquesa de Griñón ensombrecía de nuevo a su madre al confirmar una segunda oportunidad a Íñigo Onieva, algo que se esperaba porque ella seguía muy enamorada.
Aunque Tamara Falcó aseguraba que no le iba a perdonar jamás, su ruptura ha durado menos que un nanosegundo en el metaverso. Ella tenía claro que no quería saber nada de él, pero el empresario iba a hacer todo lo posible por reconquistarla, y lo ha conseguido. Íñigo Onieva también ha estado muy enamorado de la marquesa, por este motivo se puso tan celoso cuando se enteró que entre su amigo Hugo y ella podría haber algo más que una amistad. Allí todo cambió entre ellos y se produjo un acercamiento.
Los futuros planes de Tamara Falcó e Íñigo Onieva
Ambos se reencontraron curiosamente en la Misa del Gallo, sorprende porque Íñigo no es nada religioso, pero sabía que Tamara iría, como todos los años. El 31 de diciembre pasaron la noche juntos y entraron al 2023 enamorados. El día 3 de enero apareció la exclusiva. La marquesa de Griñón ha aprendido de su madre y ha sabido rentabilizar su ruptura y su reconciliación. Su caché está en estos momentos por las nubes. Más dinero facturará con todo lo que está por llegar.
Aunque los protagonistas no lo han confirmado, su entorno más próximo habla de boda. Los jóvenes intentarán una vez más pasar por el altar, y podrían adelantar la fecha prevista. Tienen demasiada prisa. El diseñador de coches tiene que ir con mucho cuidado a partir de ahora porque todos sus pasos serán analizados con lupa.
Tamara Falcó tiene muchos planes de futuro, y en todos ellos cuenta con Íñigo Onieva. Está interesada en acabar su curso en Le Cordon Bleu y abrir en un futuro un restaurante en Madrid con el empresario, mientras practica en ‘El Rincón’, el palacio que heredó de su padre, Carlos Falcó.
Como guinda del pastel se habla de un hijo. Tamara Falcó desveló sus deseos de ser madre si llegaba la persona adecuada y para ella Íñigo lo es. No quiere tardar mucho porque ya tiene 42 años. Le haría especia ilusión llamarle Carlitos si es varón, en homenaje a su difunto padre.