Ser hija de Isabel Preysler puede ser una bendición... o una tortura. La reina de corazones hace tiempo que abdicó de su trono a favor de Tamara Falcó, aunque la filipina todavía no puede ser considerada emérita. Aún ejerce como tal, especialmente para destrozar a su ex Mario Vargas Llosa y a su enemiga Patricia Losa. Pero la Falcó le ha birlado contratos publicitarios y espacio en portadas y programas de cotilleo, es una obviedad. Va por la vida como la quintaesencia del universo de la jet-set, aunque se haya demostrado que tiene los pies de barro. Ni siquiera calzándolos consigue evitar resbalones en el momento más inesperado. "La fama cuesta y aquí es dónde váis a empezar a pagar", Tamara.
El peaje es convivir con la presencia constante de cámaras y reporteros las 24 horas del día, ver cómo cada pequeño rinconcito de tu intimidad forma parte del debate público.De la loa a al cachondeo, del elogio a la crítica. Ha ofrecido munición a espuertas con su esperpéntica relación-ruptura-reconciliación con Ínigo Onieva, que nadie lo olvide. El giro de guion final, con el joven tarambana abrazando la oración para reconquistar a la mujer que engañaba es una mina de oro. El próximo mes de julio el idilio quedará sellado en una boda ante el Santísimo y la humanidad. La pija, sí. Pero por muy pijos que sean, acabarán igual que todos los mortales en el bodorrio: haciendo pipí en un urinario portátil. Falcó quiere marcar diferencias: yo soy más que vosotros.
Íñigo Onieva tiene a Tamara con el corazón en un puño: nada sale como ella esperaba
El futuro matrimonio se está dedicando a hacer revivir la llama del amor, estropeado tras el morreo de Onieva en una rave gigante en EE.UU. y las sospechas de que fue solo uno más de las deslealtades a la novia. Pero oiga, viva el amor, aunque sea ciego, sordo y mudo. En este caso también podría ser cojo, especialmente después de la celebración que hicieron durante San Valentín. Fueron a cenar a un restaurante carísimo de Madrid, ideal de la muerte. Todo tenía que ser perfecto, Cupido disparando flechas decoradas con corazoncitos y osos amorosos como un psycho. Pero a Tamara todo le sale mal: el marido infiel y trabajando en un local investigado por la policía nacional: 40 agentes irrumpieron en la sala de la que es director de relaciones públicas en busca de drogas y armas. Parecía Froilán. A pesar de no haber detenidos, el operativo no era un simulacro. Tamara sabe que en cualquier momento podría resbalar... y caer de bruces. Como acabó la noche de los enamorados. Catapum.
La foto que Tamara Falcó quería esconder: se cae de bruces con zapatos de 1.000 euros
Lecturas publica una foto con mucho jugo. Falcó en el suelo tras perder el equilibrio cuando subía unos peldaños a poca distancia de Íñigo. Cayó como un saco de patatas, aunque por suerte no se hizo daño. Otra cosa es la sensación de ridículo, que en circunstancias normales es la que todos sentimos en una situación similar, pero que en su caso se magnifica. Siempre tiene que salir perfecta. Vaya castigo. La imagen ha pasado días guardada en un cajón, la protagonista no quería que nadie la viera. Confiaba en los responsables de las revistas, en que serían mejores personas que los fotógrafos y paparazzi. De hecho se quejó de que los periodistas no la ayudaron a levantarse, solo disparaban las máquinas fotográficas mientras le decían "¿estás bien?". Eso sí, reconocía que le sorprendía que la secuencia no se hubiera publicado y que la trataban muy bien. Pues no, mira. Alguien se ha desmarcado, y ha dejado al descubierto un detalle que subraya el tipo de lujo obsceno que rodea a Tamara. Inútil, por cierto, a la hora de la verdad no le sirve de nada. Es decir, llevar zapatos de 1.000€ de una marca top que no cumplen con su función principal: caminar recta. Estos solo son de postureo. Como ella.
Tamara Falcó tropezó al salir del restaurante donde celebró con Íñigo su primer día de los enamorados tras su sonada ruptura y su reconciliación #Exclusiva #exclusivalecturas https://t.co/EI8dScpoc7 pic.twitter.com/X70enO96hW
— Lecturas (@Lecturas) February 22, 2023
Insistimos con las dos caras de Tamara: zapatos de miles de euros, invitados a la boda orinando como en el Primavera Sound. Ella es así.