Telecinco tiene dos programas por la mañana de la misma productora: El Programa de AR y Ya es mediodía. El segundo, de Sonsóles Ónega, empieza a coger los tics malos del de Ana Rosa cuando tratan de Catalunya. En el programa del martes el reportero catalán Miquel Valls, que cubre Catalunya para los dos programas, trataba del coronavirus y ha tenido la desvergüenza de sobreimpresionar "Directo Lleida" desde la calle Casanovas de Barcelona, en la fachada delante de el Hospital Clínico. Sónsoles Ónega decía "Miquel Valls, Lleida ¿última hora"?. Toman a los espectadores por imbéciles.
Al mismo tiempo mentirosos, zánganos y chapuceros. Para ahorrarse el trayecto a Lleida el reportero habla como si estuviera en el Segrià desde el Eixample Izquierdo: "Pues sí. Preocupación y máxima. No se descarta que en esta demarcación hablemos de miles de positivos". Segunda conexión e insiste la presentadora "Miquel Valls en Lleida..." y Valls le sigue la mentira haciéndose el loco. Son tan torpes que mientras el reportero está delante de el hospital de Barcelona ponen imágenes del hospital Arnau de Vilanova de Lleida para demostrar que no es el mismo.
La intoxicación es tan lamentable que la red dice basta:
Telecinco tendría que plantearse cómo deja los espacios informativos a productoras externas que juegan así con la información. Porque el problema es: si mienten así en una cosa tan estúpida, ¿cómo no mentirán con todo el resto de informaciones de Catalunya?