El 'pin parental' o 'pin neandertal', como lo ha bautizado Gabriel Rufián, ha generado este viernes que Toni Cantó haya vuelto a ser trending topic. Hacía tiempo que el irrelevante político no se ponía en uno de los fregaos a los que nos tiene demasiado bien acostumbrados. Pero como con el móvil es más peligroso que un mono con pistolas, ha vuelto a ganarse el cariño de la red.

Europa Press

El pin parental que Vox ha puesto como requisito para su apoyo a los presupuestos en las Comunidades Autónomas de Murcia, Madrid y Andalucía ha visto las últimas horas como el mismo partido naranja de Cantó, pasaba del no al sí de la noche al día. Después de decir que era una "línea roja" que Cs no estaba dispuesta a aceptar hasta que se viera claramente su legalidad, parece que está dispuesto a seguir adelante con sus socios de gobierno en Murcia sobre esta cuestión. Mientras tanto, la ministra de Educación, Isabel Celaá, ha asegurado que el pin parental "vulnera el derecho fundamental de los niños a ser educados. Es un instrumento de censura educativa que no podemos tolerar en nuestras escuelas". Según Celaá, "este derecho fundamental a la educación pertenece a cada persona desde su nacimiento. Y no podemos pensar que los hijos pertenecen a los padres". Esta última frase ha despertado Cantó de la siesta. Con su habitual tono chulopiscinesco, el actor/político valenciano ha respondido:

Y la red también...:

Toni Cantó ya recibió de lo lindo cuando se atribuyó la condición de pedagogo a su historial oficial sin tener el título universitario correspondiente. A Cantó sí que le haría falta un pin. En el cerebro.