La pasada semana, muchos presentadores actuales y alguno de histórico (aunque se echaron de menos muchas caras, algunos de ellos, verbalizando su sorpresa por no aparecer) se dejaron caer en el programa especial que se grabó en TV3 con motivo de los 40 años de historia de la televisión pública catalana. Aunque el programa se emitió el viernes, se grabó el día 16, el martes, justo cuando hacía 40 años de las emisiones regulares, 40 años después del día que empezó una parrilla con cara y ojos. Y este martes, el camino de acceso a la puerta roja giratoria de TV3 se llenó de personas muy elegantes que no se lo querían perder, como por ejemplo, tres compañeros del TN Vespre, Toni Cruanyes, Tomàs Molina y Maria Fernández Vidal, respectivamente, el presentador y editor del informativo, el meteorólogo y la periodista encargada de ofrecer la información deportiva.
Fue una noche de celebración, de reencuentros con antiguos compañeros y amigos, de lucir las mejores galas y de sonrisas de oreja a oreja. Pero no hay que ir vestidos con un smoking elegantísimo o un vestido azul de traca para estar radiantes (aunque tenían un aspecto maravilloso). No hay que ir a una gala de los 40 años de la historia de TV3 para ser feliz. No hay que estar en la tele para vivir un día inolvidable... Hay suficiente con coger el coche, ir a pasear por Catalunya, pasar un día al aire libre paseando por alguno de los rincones preciosos de país que tenemos y para coger fuerzas, ir a alguno de los restaurantes que hay por todo el territorio, donde hacen manduca de la buena, donde hacen cocina casera heredada de abuelos y abuelas a padres y madres y a nietos y nietas. Y qué mejor que disfrutar de una tradición muy nuestra que no tienen en ninguna otra parte del mundo. Una costumbre catalanísima que ahora empieza su época gloriosa del año: una calçotada. Los dos han mostrado que ya se han metido de lleno en uno de los placeres celestiales que hay en la Tierra, mojar este bien de Dios dentro de la salsita, alzarlos muy arriba y para abajo, engulléndolos con ansia. Maravilloso:
Y es que Toni y Maria, siempre que pueden, son de los que hacen país. Es habitual verlos a los dos con sus respectivas familias yendo a recorrer algún lugar de casa, maravillados por las bondades, los paisajes, la gente, las costumbres y los festines que tenemos en Catalunya y que no nos los acabamos de tantos como hay. Dos personas encantadas de la vida de aprovechar los fines de semana come il faut y salir y regalarse una comida como esta. Ya lo saben: a la que puedan, este próximo fin de semana, si pueden, hagan como Maria y Toni. Es una de las mejores cosas que se pueden hacer en Catalunya a la que tengan un rato libre. Larga vida a los calçots.