Toñi Moreno la ha pifiado, y lo está pagando. La presentadora catalana de Canal Sur recordará durante mucho tiempo el patinazo que protagonizó en directo con una invitada, Bella. Una tiktoker norteamericana residente en Andalucía y que se ha hecho famosa por explicar las bondades del estilo de vida español. Un personaje muy goloso para un programa como el de Toñi y una tele como la de PP y VOX, era un win win. Para completar la oferta irresistible, la chica habla castellano perfectamente. Tan perfectamente que entiende también las bromas, los chistes y los comentarios de mal gusto. Moreno no es una comunicadora que se haya hecho famosa por faltar al respeto, ni mucho menos, pero vete a saber qué le pasó por la cabeza para acabar haciendo comentarios hirientes sobre el físico de Bella. Y a la cara. El peso, el volumen, todo eso. "Es que está mucho más delgada ¿O son las lentejas con chorizo que te has metido". Demasiado gratuito. Fatal.
La chica quedó tocada a pesar de hacer el papelón en directo, y con el paso del tiempo acabó colapsando. Colgaba un vídeo en su canal explicando una vivencia muy desagradable, y lo hacía con lágrimas en los ojos. Despertaba una enorme oleada de solidaridad, pero también de ira contra Toñi Moreno. La pusieron a parir. Cosa de la que fue consciente inmediatamente, claro. Los mensajes a la yugular le caían de todas partes. Pues bien, Moreno ha pasado una mala noche. Y al día siguiente del lío, ha vuelto al escenario del crimen, haciendo un gesto que la honra: pedir disculpas. Sinceras. Y nos las creemos, porque tiene crédito. Se lo ha ganado.
"Nada más lejos de mi intención hacerte daño. Estuve desafortunada. Bromeo mucho, y me pasé. Bromear sobre mí se una cosa, y sobre ti es otra. No sabía que este tema fuera tan sensible para ti, si lo llego a saber, en la vida. Además no tiene ni gracia". Moreno revela que Bella no era solo una invitada, sino una colaboradora con quien querían trabajar a menudo. No pasará, porque no respondió al teléfono a Moreno durante toda la tarde, y finalmente atendió al departamento de producción de 'Hoy en Día' para declinar la invitación para recibir la disculpa en el mismo plató de Canal Sur. "Que te quede claro: lo último que quiero es hacerte daño, hacerte pasar ese mal rato. A ti, y a otras personas". Convincente y real. Como también reales son las barbaridades que sobre ella, denuncia, inundan las redes sociales.
"Eras una gordófoba de mierda", "alcohólica", "garrula", "trepa, rastrera, ¿tú pasas hambre? "sinvergüenza"... La pantalla gigante a espaldas de la de El Prat de Llobregat iba pasando algunos de los calificativos con los que lo han lapidado. "Un linchamiento", asegura, en el que también hay amenazas a su hija de cortísima edad. Tampoco lo ha pasado bien la madre y hermanas de la presentadora. "No voy a aceptar que me insultéis, porque yo no soy eso". La voz se le entrecorta, las lágrimas brotan tímidamente de sus ojos. Está viviendo un infierno por un error, es excesivo. Mucho más se acepta en otros personajes y siempre se van de rositas. Basta.