Vox no desiste en su horrorosa lucha para hacer desaparecer la lengua catalana de cualquier espacio donde irrumpe. Desde que consiguió formar gobierno con el PP en Valencia, sus intentos con el fin de reprimir la cultura arraigada a la tierra a lo largo de los Países Catalanes no han desistido en ningún momento. Ellos, contra vientos y mareas, lo tienen claro. Quieren acabar con cualquier ápice de catalanidad por implantar desde el autoritarismo. Para muestra, el último movimiento que el partido de Abascal ha hecho en la ciudad. De aquellos que dan vergüenza, pero de la buena.

Y es que con la consigna de visibilizar la exigencia de que todos los documentos oficiales del consistorio incluyan el topónimo 'Valencia' en español, Juan Manuel Badenas, el portavoz, ha protagonizado una actuación surrealista. Adhesivo de la bandera de España en mano, lo ha colocado sobre el acento del nombre de la ciudad en el logotipo oficial del Ayuntamiento. Dicen que esta nomenclatura es ahora el oficial. Ridículo.

La implacable reacción de Toni Soler al último movimiento de Vox

Enésimo movimiento de la formación verde en busca de atención que, irremediablemente, la consigue. Aun así, nunca está de más que personalidades reconocidas aprovechen para visibilizar cuan grotesco es tener personas con pensamiento que destilan tal ranciedad dirigiendo algo. Y quién mejor para destrozarlos que Toni Soler. "¿El término 'analfabetocràcia' existe? Porque si no, no sé como definir el régimen político valenciano", ha publicado el presentador del Està passant de TV3 en su perfil de la plataforma X. Poesía pura.

Y es que la red no podía quedarse callada ante tan lamentable show. Entre los internautas que tildan el gesto de lastimoso y los integrantes del partido de impresentables, se encuentran perlas como la que aquí recogemos. "Llevan en el bolsillo banderitas como si fueran caramelos", bromea un usuario. "Por si había alguna duda que el acento abierto o cerrado era un problema para esta gente. ¡El problema para ellos es directamente el valenciano! ¡Quieren hacerlo desaparecer! Pero por mucho que lo intenten no lo conseguirán", escribe otro. Y que así sea.

No es la primera vez que el periodista los destroza

Poca sorpresa ante la reacción de Soler, que ya el pasado mes de mayo aprovechó su presencia en el mundo de Internet para posicionarse en contra de la actitud de la extrema derecha. Cuando Santiago Abascal hacía demagogia sobre el caso Vinicius el pasado mes de mayo y decía que "en España los principales racistas son los supremacistas vascos y catalanes, que son los aliados del gobierno de Sánchez", la respuesta del periodista era contundente: "La catalanofobia es estructural y es un factor de cohesión en España. Por eso nos necesitan tanto". Didáctico, conciso y acertado como pocos.

Su indignación burlesca es una de las armas más sutiles a la vez que efectivas para hacer frente a casos que insultan tanto al catalán como este que aquí recogemos. Toni Soler 1 - 0 Vox. Por encima de todo, que gane la lengua.