El panorama en TV3 es del color de un televisor apagado: negro. Desde que Vicent Sanchis ha anunciado recortes causados por el cambio de normativa en la Ley de contratos públicos, TV3 tiene la obligación legal de devolver a Hacienda 20 millones de euros inmediatamente. Los espectadores sufren por la programación co-producida porque el director de TV3 afirma que a partir de junio no la habrá. Por lo tanto no se emitirá Polònia, Està passant, El foraster, FAQ's o l'APM?. Pero los trabajadores de TV3 acaban de advertir que la CCMA prevé recortes también en la producción propia. El Comité de Empresa ha explicado sus temores después de la última reunión con Sanchis. Como han pedido productores externos como Josep Cuní o Jaume Roures los recortes tienen que repartirse. Y ya hay víctimas señaladas.
Se suprimirán tres corresponsalías: Moscú, Pequín y América Latina, por lo tanto vuelven a Sant Joan Despí Manel Alías,para muchos el mejor corresponsal de la casa, Francesc Canals y Joan Biosca. Como el hachazo tiene que ser de 33 millones de euros no es suficiente y hay que cortar más jamón para dejarlo en el hueso. Una de las sorpresas es que el último trimestre ya no se emitirá Com si fos ahir. El culebrón de los mediodías es la única serie que hace 25 años produce sola la cadena. Poble Nou, Nissaga de poder, El cor de la ciutat.. todos han salido del talento de TV3 pero es un producto caro y también caerá de la parrilla. Habrá durado menos de un año.
Los que pedían la supresión del canal Esport3 están más cerca de conseguirlo. TV3 no podrá adquirir derechos deportivos de casi ningún deporte y por lo tanto los trabajadores ven peligrar dos departamentos puntales de la casa como el de Dramáticos y el de Deportes. Los dos programas de reportajes no podrían adquirir los producidos en el extranjero y por lo tanto el 30 minutos y el Sense ficció sólo podrán emitir documentales propios. Una previsión alarmista si se tiene en cuenta que un documental comprado es infinitamente más barato que uno producido en casa si es de una calidad media. El comité recuerda que otro éxito como Joc de cartes tampoco volverá, cosa sabida ya que era una coproducción con Magnolia. Todas estas medidas las anuncian los trabajadores pero son reversibles si la nueva Generalitat dedica una partida presupuestaria extraordinaria a favor de la CCMA.
Los trabajadores piden que la CCMA pare las decisiones irreversibles, como la supresión de Tarda oberta prevista para el 2 de febrero. Que negocie con Hacienda o que recurra a los tribunales, cosa que ya se ha hecho para evitar la reclamación retroactiva de 168 millones de euros que haría cerrar TV3. Los empleados se reunirán en los próximos días para tomar decisiones. Pero ya piden al nuevo Parlament que inyecte dinero. Los cálculos hablan de 39 millones sólo este año, para emitir TV3 como hasta ahora. La palabra 'huelga' no ha sido pronunciada probablemente porque si los trabajadores la hacen, a Rajoy ya le iría bien. Sería un disparo al pie.