Los Sánchez son una familia normal: de las de bermudas, bikini y toalla. Las imágenes captadas por los paparazzis el año 2016, con Pedro Sánchez jefe de la oposición, difícilmente se repetirán este verano, el primero con el socialista en la Moncloa. Entre los "deberes" que le ha encargado Carles Puigdemont y la polémica por su asistencia al FIB para el concierto de The Killers, el PSOE se afana por consolidar la figura del presidente y comunicar dónde pasará las vacaciones. No tiene agenda oficial entre el 3 y el 24 de agosto. Tres semanas en las que Sánchez tiene previsto descansar. ¿Dónde? Las fotos de hace dos veranos se captaron en Ibiza pero los Sánchez tienen un apartamento de 120 mil € en un pueblo almeriense: Mojácar. No parece el espacio idóneo para la seguridad que necesita a un presidente con su esposa, Begoña Gómez, y sus hijas, Ainhoa y Carlota.
Entre un hotel ibicenco o un apartamento almeriense, los servicios de seguridad aconsejas a todos los presidentes veranear en grandes fincas patrimonio del Estado. Felipe González acostumbraba a instalarse en Doñana y Aznar, Zapatero y Rajoy siguieron esta tradición y ocuparon un Palau de Patrimonio Nacional en Ayamonte, Huelva. La prensa extranjera que ha bautizado a Pedro Sánchez como "Mister Handsome", señor Tío Bueno, querrá una foto de Sánchez en calzón corto. Algunos enloquecieron con una foto de un presunto Rajoy en la playa pero la misma Celia Villalobos negó que fuera del expresidente con el sangrante argumento: "No es su cuerpo".
El portal LOC informa de que "no "consta" si Sánchez piensa seguir la tradición andaluza de todos a los presidentes españoles de pasar las vacaciones en la costa atlántica. Hay un palacio patrimonio del Estado que podría quedar libre este verano. Y del gusto de Sánchez ya que está en las Baleares, donde le gusta veranear. Parece que quedará vacío muy pronto. Se llama Marivent.