La empresa era complicada, pero nadie se imaginaba la magnitud de la tragedia televisiva. La Sexta se ha levantado con una bofetada colosal al recibir los datos de audiencia del estreno de la nueva temporada de 'El Objetivo', el programa de la periodista Ana Pastor. El espacio acaba de mudarse en la parrilla, pasando de las noches de los domingos a la de los miércoles. La apuesta ha salido fatal. Un 3'3%, o lo que es lo mismo, 337.000 espectadores en todo el territorio estatal. No era fácil luchar contra 'La Última Tentación' de Telecinco o 'Veo como cantas' de Antena 3, claro. Y tampoco es que pudieran presumir de los datos de las últimas temporadas. Pero la diferencia es tan abismal que debería preocupar a los programadores de la cadena de Atresmedia. Sí, Pastor es una intocable, pero la tele no entiende de amigos. Las cosas acaban cayendo por su propio peso.
El espacio de análisis político y de actualidad ha sacudido su nómina de colaboradores con fichajes notables. Por ejemplo, Ínigo Errejón y Andrea Levy compartiendo mesa de debate. O Roberto Enríquez, Bob Pop, estrenando sección. Nada ha funcionado. Tampoco la llegada de un personaje muy conocido en Catalunya: el crítico y escritor Víctor Amela. Un fiasco.
Amela comparte un bloque que se titula 'Cómo hemos cambiado' junto a una compañera en el 'Planta Baixa' de su detestada TV3, Mariola Cubells, la periodista y escritora Rosa Belmonte o uno de los miembros de la revista 'Mongolia', Edu Galán. Sí, sabemos lo que están pensando: los cuatro parecen un sanedrín antiindepe de primera línea. Y mira que tuvieron la oportunidad de meter la cuñita, porque durante el debate sobre cómo ha evolucionado España en laso últimas décadas desde el punto de vista social, mediático y político, con especial énfasis en el terreno del humor, salió el nombre de Pepe Rubianes y de la tele pública catalana. Pero no lo hicieron, quizá quedándose con las ganas.
Ahora bien, que nadie descarte nada. Puede que lo piensen mejor en próximos episodios, porque ya saben que zurrara Catalunya engancha espectadores en la meseta. Y un 3,3% es uno de aquellos datos que hace activar todas las alarmas en una cadena generalista, más teniendo en cuenta la supuesta envergadura de sus participantes. La lectura podría ser esta: Pastor, Galán, Levy, Errejón y Amela no interesan. Fin de la historia.
Hay otra lectura, mucho más positiva. Si el primer día te estrellas de esta manera, lo tienes que hacer muy mal para no remontar la cosa. Quien no se consuela es porque no quiere, ya saben.