Rosalía es artista y entre los muchos palos que toca está el trap. Un género musical con una iconografía propia: hombres duros, mujeres potentes, pintadas, ceñidas y sexys, garitos de mala muerte, alcohol, pistolas y clubs de estriptís. Todo muy impostado, forzado y de videoclip. Rosalía sólo lo explota en parte.
La catalana hace flamenco y tiene interpretaciones de una sensibilidad muy especial como Si me das a elegir de los Goya. También juega con la iconografía trap. Y en el after party de los Grammy en una discoteca de Los Ángeles la grabaron a escondidas en un momento discotequero. Este es el vídeo:
Rosalía de cuero rojo a la salida vestida para la fiesta. En la discoteca unas gogós en tanga se ponen a 4 patas para que estrellas como Dua Lipa o Rosalía introduzcan billetes de dólar al tanga. Se llama "perreo".
Fuera de contexto es un vídeo sexista, pero es pura iconografía de cultura trap sin mala intención. Los puritanos en las redes acusan a la artista que más ha empoderado a las mujeres el último año de ser antifeminista. Le tenían ganas:
La hipocresía es valorar a alguien no por la sensibilidad de su arte sino por un show privado en una fiesta. Puretas lejos. Si me das a elegir, Rosalía, me quedo contigo.