Sobrecogedora noticia la que acabamos de saber sobre un exfutbolista internacional. Se trata del austríaco Volkan Kahraman, que ha sido asesinado a los 43 años. Una tragedia y más si tenemos en cuenta las circunstancias que han rodeado esta muerte. Según medios locales, ha habido una terrible discusión entre él y un amigo suyo en una cafetería, motivo que ha desembocado en un tiro en la cabeza con un arma de fuego. La policía y el personal sanitario han ido rápidamente al lugar de los hechos, donde después del asesinato del exfutbolista, ha continuado el drama. ¿Por qué? Porque el asesino, después de matar a Kharaman, ha disparado a otra persona que había en el bar y después se ha quitado la vida a él mismo de otro disparo.
Según el diario Kronenzeitung, Orhan S., el autor de los tiros, era el amo de la cafetería y sostenía una relación de amistad con Volkan Kahraman desde hace años, pero los celos de una de las partes desencadenaron el enfrentamiento dentro del local comercial. Conmoción, pues, especialmente por parte de los ciudadanos austríacos, que han visto cómo se acababa de esta manera tan violenta la vida de un futbolista que fue una joven promesa durante la década de los años 90, cuando tenía poco más que 16 años. Empezó a despuntar futbolísticamente hablando, en el Feyenoord holandés, pero después de un tiempo donde sus participaciones fueron disminuyendo, fichó por el Excelsior. El centrocampista, además, llegó a ser internacional con su selección hasta en tres ocasiones. Después de la liga holandesa, fue a jugar a su país, a las filas del Pasching, donde tuvo una de sus mejores temporadas. El buen papel en la liga austríaca propiciaron que pudiera vestir y defender la camiseta de su país.
Nacido en Viena, hijo de una familia de inmigrantes turcos, desde pequeño fue un apasionado por la pelota. Pero su carrera no acabó nunca de despegar como él le habría gustado. Kahraman tenía claro que "Siempre he visto el fútbol de una manera diferente a mis entrenadores y no siempre he hecho lo que me pedían. Eso, sin duda, incluía correr. A menudo me lesionaba y a menudo discutía con los entrenadores". Y después de que su estrella se fuera apagando, sin embargo, yendo de un equipo austríaco a otro, cada vez en categorías más modestas, colgó las botas en el 2010. Una vez dejó el fútbol, se lanzó al mundo de la política, presentándose a las elecciones parlamentarias como principal candidato a las listas del partido OVP. En el 2015 fue elegido miembro del consejo de distrito de Simmering para la plataforma Together for Vienna (GfW), en el 2016 fue atraído por el ÖVP, por el cual también se presentó a las elecciones nacionales del 2017. Descanse en paz.