Leo Messi vive en Castelldefels y en el Aeropuerto de El Prat los aviones despegan por Gavà. Pero el CEO de la compañía aérea Vueling no sabe de mapas y si de patas, concretamente de meterla. Javier Sánchez-Prieto se hizo el milhombres en ESADE acusando al 10 del Barça de ser la causa por la que el Aeropuerto no crece para evitar molestarlo. 48h ha tardado la compañía en rectificar:
El tuit habla de asuntos medioambientales como si los culés fueran tontos. Messi no es un pajarito en peligro de extinción que haya que proteger en el delta del Llobregat. Nada de causa medioambiental, el Sr. Vueling dijo "impiden (los aviones) pasar por donde vive Messi, una cosa que no pasa en ningún sitio del mundo". Lo que no pasa en ningún sitio es que el jefe de la empresa la deje en ridículo y no dimita.
El comunicado posterior al desayuno-conferencia en ESADE:: "Al final de esta intervención, continuando con el símil futbolístico y en tono más cercano con los asistentes, se comentó que parte de las limitaciones se debían a no poder sobrevolar algunas viviendas, haciendo mención a la del futbolista. Queremos reiterar que NUNCA fue nuestra intención involucrar al jugador en ninguna polémica y podemos dar fe de que NUNCA ha emitido ninguna declaración en relación al aeropuerto ni a su operativa". Los nunca en mayúsculas son de Vueling. Quizás son los gritos que los accionistas le soltaron al sr. Prieto, que es de Madrid (ignoramos si del Madrid) y proviene de Iberia.
El Barça busca una compañía aérea que sustituya a Turkish Airlines y Qatar Airways. Algunos creen que con Vueling llegaría tarde a los partidos. A la compañía le han caído unos cuantos comentarios que aprovechan para criticar incluso la calidad del zumo de naranja a bordo:
Messi no ha dicho ni pío. Con marcarle 3 goles al Atlético Madrid, posible equipo del sr. Prieto, le basta.