El Barça empieza a funcionar, y de qué manera, de la mano del gran Xavi Hernández. El técnico de Terrassa no hace ni dos meses que debutó con el club azulgrana y ya se empieza a notar su mano en el banquillo. La incidencia del nuevo entrenador del Barça se está notando cada vez más: sus futbolistas empiezan a saber a qué juegan, los jóvenes no paran de evolucionar y ahora el equipo parece tener la autoestima mucho más alta y compiten como hacía tiempo no se recordaba.
A pesar de quedar eliminados de la Supercopa de España el otro día en perder las semifinales contra el eterno rival, los de Xavi se merecieron la victoria en buena parte del partido, y sólo errores puntuales y el acierto a la contra del Real Madrid acabó con las esperanzas de jugar la final.
El Barça perdió, sí, pero las sensaciones fueron de victoria. Y ahora, además, Xavi puede trabajar con buena parte de los hombres que hasta ahora estaban lesionados o con covid: el reciente fichaje Ferran Torres, pero también Pedri o Ansu Fati.
Veremos qué pasa los próximos días. De momento, la eliminación de la Supercopa hizo que el Barça no esté hoy en el King Fahd Stadium de Riad, donde el conjunto de Ancelotti y el Athletic Club disputarán la final. Probablemente Xavi vea el partido por la tele de casa, analizando con detalle al conjunto vasco, próximo rival de los azulgranas, el próximo jueves, en los octavos de final de la Copa del Rey.
El Barça volvió a casa, motivo por el cual, este sábado por la noche los jugadores y el técnico pudieron disfrutar de un momento en familia, con amigos o tranquilamente en casa. En el caso de Xavi y su mujer, Núria Cunillera, aprovecharon la noche de este fin de semana para ir a cenar con amigos a un restaurante maravilloso, el Oaxaca Cuina Mexicana del Pla del Palau, en Barcelona.
Núria ha inmortalizado la velada con un vídeo delicioso donde se ven todos los platillos que la pareja y sus amigos se metieron entre pecho y espalda. Una retahíla de delicatessen picantitas, de tortillas, frijoles, cilantro, ropa vieja y otros productos típicos de la mejor gastronomía mexicana que ofrece a sus clientes el chef catalano-mexicano Joan Bagur, "cocina mexicana tradicional y 'mezcaleria en el corazón de Barcelona', tal como ellos mismos pregonan.
La camarera les recomienda que a pesar de que cada plato tiene una parte picante, que aflojen el ritmo si no quieren que les empiecen a salir lágrimas de los ojos y que la lengua se les ponga roja del picante. Desconocemos si Xavi Hernández hizo caso de las indicaciones o no, él que también es de dar órdenes a sus jugadores.
De momento, con la cara pagaba. Expresión granuja de complicidad del técnico azulgrana, ceja hacia arriba, con cara de decirle a su mujer Núria, que lo estaba grabando, que no veía la hora de hincarle mordisco a la tortita que se acaba de preparar.
Seguro que Xavi cogió fuerzas de cara a los próximos compromisos de su equipo.
No sabemos si el yantar que cenó el entrenador azulgrana y su mujer tuvo extra de picante o no, pero lo que no hay duda es que el juego del Barça, de su mano, empieza a tener aquel gustito picante tan agradable de épocas pasadas, después de mucho tiempo donde los platos que ofrecía el conjunto azulgrana eran absolutamente sosos e insípidos.