En un momento de la entrevista con Andreu Buenafuente, el primer invitado (Xavier Graset, gato viejo, tuvo el acierto de escoger a alguien como él, una apuesta segura, para su estreno), y quien le dio una oportunidad en el Sense títol, casi 30 años atrás, el presentador de La selva le dijo a Andreu: "Esperemos que no nos pase como a Carlos Latre, que solo ha podido hacer 13 programas," en referencia a que ya se han cargado su Babylon Show por malas audiencias. En La selva no pasará. Primero, porque TV3 no es Telecinco, aquí las cosas van con más calma, a fuego lento, y dando la oportunidad a los programas a que vayan encontrando su espacio, sin la guillotina constante de las audiencias encima de sus cabezas. Y segundo, porque el estreno del nuevo programa de tardes de la televisión catalana ha sido un éxito, debutando líder en su franja con un Graset a quien se le vio bastante cómodo, sobre todo a la hora de abordar la información pura y dura, aunque también se soltó en la parte más frívola.

Ya se lo dijo Andreu, que "tú hacías mucho de periodista (cuando lo fichó hace años y popularizó aquello de 'La información es una selva'), pero yo sabía de tus dotes más del cachondeo". Y ciertamente, el paso del Més 324La selva le ha sentado bien al bueno de Graset, o "Grasset", como le han puesto en algún letrero en su propio programa. El programa debutó con un excelente 13,7% de share, siendoe la opción preferida por los espectadores catalanes a aquella hora, que quisieron ver qué pescado se vendía allí, con Xavier Graset repartiendo juego y rodeándose de gente de peso como el mencionado Buenafuente o Antoni Bassas para su estreno.

Sobre el contenido, un poco de todo, combinación de actualidad y lo que pasaba fuera, por ejemplo, lamentablemente, en el Priorat, con los incendios que ha habido, y lo que pasaba dentro de plató, con un tono distendido y de buen rollo. Y eso que el mismo Graset verbalizó que "en la tele cuesta hacer cosas que no se han hecho nunca". Lo que ya se había hecho, y que en La selva han reproducido, es lo que toca, fueron las pertinentes conexiones para hablar, por ejemplo, de ir al gimnasio una vez acabado el verano, o la habitual tertulia de análisis, o incluso, un pequeño concurso dentro del programa. Y lo que todavía no habíamos visto, hasta ayer, fue reproducir cómo se hacían aquellas fotos antiguas, revelando las fotografías con cianuro, con el presentador como conejillo de indias. Un Graset que después de nueve temporadas ininterrumpidas y un total de 1.744 programas en directo, dejaba el Més 324 para abordar este nuevo reto profesional donde la clave la tiene él: porque si una cosa tenemos que destacar de él y de su anterior programa, aparte de su bondad, cultura y bagaje, es su capacidad para aportar un "periodismo de autor", como bien ha definido José Antich. Y si a Graset le da a La selva este toque de autor, tendrá mucho de ganado.

graset
Xavier Graset / TV3

Como decíamos, qué mejor que invitar a Andreu Buenafuente al primer programa. El presentador de Reus estrena el lunes la nueva edición de Vosaltres mateixos y está a punto de estrenar también la obra El tenoriu, con su mujer, Sílvia Abril, en el Teatro Poliorama de Barcelona. Un Buenafuente que ha recordado cómo en sus inicios le decían a menudo que "me recuerdas al Capri", y precisamente sobre la figura de este queridísimo e icónico humorista catalán es sobre lo que está trabajando ahora: "Estamos trabajando en algunos proyectos en torno a Capri, cosa que me gustaría recuperar, tengo una especie de obsesión personal". Joan Capri bajo el prisma de Andreu Buenafuente... una maravilla lo que puede salir de aquí.

graset uno
Andreu Buenafuente y Xavier Graset / TV3

Graset preguntaba al inicio del programa si "¿habéis sentido la llamada de 'La selva'?, y a juzgar por los buenos resultados, parece que sí. Pero él sabe que lo más difícil, después de un estreno, es ir a por el segundo. Y los programas siguientes. Con algunos pequeños retoques de ritmo, de iluminación, de dejarse ir, seguro que conseguirá que los espectadores catalanes nos adentremos cada tarde entre las lianas y la fauna de esta selva.