Uno de los mejores programas que sin duda hay hoy por hoy en la parrilla televisiva, lo encontramos cada día de lunes a viernes en el 3/24, Més 324, con el gran Xavier Graset. El periodista catalán se va a dormir tarde, pero siempre, siempre, acompañado de buena música: "Al acabar el día, la música me ofrece paz, un masaje espiritual".
Xavier Graset / TV3
Y de música y de recuerdos ligados a la música ha hablado en una conversación deliciosa con Joan Vives y Ester Pinart en el programa de radio de Catalunya Música Tots els matins del món. Han empezado escuchando una zarzuela, La Generala, que lo ha hecho pensar inmediatamente en sus padres: "Me remueve... Lo había cantado mi padre, cantante aficionado, con el cuadro de Zarzuela de Vila-seca, y siempre explicaba que la pudieron representar en el Teatro Fortuny de Reus y es la última vez que mi madre salió de casa, que tuvo un alzhéimer y fuimos a ver una versión que había hecho Paco Mir y ella la cantaba".
Graset, apasionado por la música, especialmente de la música clásica. Pero no sólo. El presentador tiene pasión por muchas otras cosas y precisamente el programa le ha pedido que llevara tres objetos físicos y un libro que lo hayan marcado especialmente y que tengan un significado ligado con sus sentimientos. Tres objetos que lo definen.
Xavier Graset / @xgraset
Graset ha llevado, por ejemplo, unos cuernos de diablo. ¿Por qué?: "El teatro a mí me gusta mucho. Haría teatro y lo vería toda mi vida si pudiera. Ahora estoy haciendo un monólogo de Chejov. También me sirve para ligar haciendo 'Els Pastorets', pero este año será el primero que no los haré".
También ha llevado al estudio un cucharón, "porque me gusta mucho la cocina y me relaja mucho. Me gusta estar entre cazuelas. Cocinar escuchando música clásica es perfecto".
Xavier Graset / @xgraset
Y el tercer objeto que lo representa y que ha emocionado a los oyentes es uno muy relacionado con su tierra: una rama de olivo: "Ahora que estamos a punto de vivir las fiestas del aceite, porque el aceite nuevo llega. esta es la mejor noticia que podemos dar".
La cosa le viene de lejos: "En casa teníamos tierras, mi padre era campesino, después se dedicó al turismo. Teníamos olivos y avellanos. El olivo es símbolo de paz y para mí, oro líquido, aceite virgen extra. La tierra a mí me enseña que no hay nada gratuito, y factores que no controlas que te lo cambian todo. La tierra se tiene que cuidar, sino, salen las malas hierbas y aquello no tira. La imagen de la tierra trabajada es una estampa preciosa".
Los objetos que más representan a Xavier Graset / @totsmatinsmon
Ver un trozo de tierra que no está cuidado hace que a Graset se le encoja el corazón. Puedes escucharlo en esta conversación deliciosa, a partir del minuto 18'44":
Una elección maravillosa.