La tensión se podía cortar con un hilo en la intervención que el periodista Xavier Sardà ha hecho durante la mañana del viernes 23 de abril en el programa La Hora de la 1. El catalán ha entrado en directo en la cadena pública, en motivo de la diada de Sant Jordi, para hablar de su último libro, 'Intercambio de vidas'. Aunque, por intercambio, los reproches entre él y la vedette, también catalana, Norma Duval, colaboradora de la sección de la crónica social del programa. Pues Duval se ha puesto de lo más nerviosa al recordar lo tremendamente mal que lo pasó en la época de Crónicas Marcianas, programa de Telecinco presentado por Xavier Sardà. ¿Qué ha pasado?

Xavier Sardà y Norma Duval, Televisión Española

"Cuando he estado haciendo Crónicas Marcianas, he estado sentado en el banquillo en unas seis ocasiones porque había gente que se sentía ofendida y tenía el perfecto derecho de presentar una denuncia", ha comentado el de Barcelona. Momento en que las cámaras, sabiendo el malestar que desde hace años acumula Norma Duval, han enfocado su cara. Una imagen vale más que mil palabras. Y en televisión, más. "Me acribillasteis en Crónicas Marcianas sin ningún motivo y todo por la audiencia", ha reprochado la actriz al presentador. "La justicia que hicisteis conmigo fue muy poca", ha añadido Duval fuera de sí. "Lo sé", ha reconocido Sardà, visiblemente arrepentido por lo ocurrido. "¿Lo sabes? Pues pídeme perdón, discúlpate conmigo", ha respondido Norma. "Si quieres me arrodillo", le ha soltado Xavier. El tenso momento entre los dos ha sido este. Dentro vídeo: 

"Lo único que me sabe mal de aquellos años en televisión, de una televisión especial, llamativa y también políticamente incorrecta, es que alguien se sintiese mal", ha explicado el hermano de la difunta actriz Rosa María Sardà, para justificar lo que pasaba  en el famoso plató de Telecinco, que noche tras noche reventaba las audiencias. "Por la audiencia hacíais barbaridades, las cosas que habéis dicho de mi no tienen nombre ni perdón", ha respondido Norma Duval levantando la mano fruto del cabreo. De todo eso ya hace veinte años. Ahora que Sardà le ha perdido disculpas públicas, ¿lo superará Duval de una vez por todas? ¿O el daño causado fue tan grande que nunca conseguirá olvidarlo?